La Sala de Reconocimiento de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) decidió remitir el caso del general (r) Mario Montoya Uribe a la Unidad de Investigación y Acusación (UIA) del mismo tribunal, debido a su negativa a aceptar responsabilidad en los crímenes de guerra y lesa humanidad relacionados con los llamados “falsos positivos”, a pesar de las pruebas en su contra.

La decisión responde a la falta de reconocimiento de Montoya sobre su contribución intencionada al surgimiento y consolidación de un patrón de crímenes en el que al menos 118 personas fueron asesinadas y desaparecidas para ser presentadas falsamente como bajas en combate en el Oriente antioqueño, cuando Montoya era comandante de la IV Brigada del Ejército Nacional.

Según la evidencia presentada, durante su mandato entre el 1 de enero de 2002 y el 14 de diciembre de 2003, Montoya habría sido responsable de crímenes de guerra, como homicidios y desapariciones forzadas, los cuales también constituyen crímenes de lesa humanidad.

Ahora, será la UIA la encargada de decidir si presenta cargos contra el general (r) ante la Sección de Ausencia de Reconocimiento de Verdad del Tribunal Especial para la Paz, donde se llevaría a cabo un juicio adversarial. En caso de ser hallado culpable, Montoya Uribe podría enfrentar una condena de hasta 20 años de prisión.

La JEP también destacó que Montoya continuará siendo investigado en el marco de la fase nacional del Caso 03, que aborda asesinatos y desapariciones forzadas presentadas como bajas en combate por agentes del Estado, en relación con los hechos ocurridos durante su tiempo al mando del Ejército Nacional.

Además del caso de Montoya Uribe, el de otro oficial, el coronel (r) Iván Darío Pineda Recuero, también fue remitido a la UIA. Mientras tanto, los otros siete imputados que han reconocido su responsabilidad por escrito se preparan para la Audiencia Pública de Reconocimiento de Verdad y Responsabilidad, la cual contará con la participación de las víctimas.