Las autoridades continúan avanzando en la investigación del atentado contra el senador y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay, quien permanece en estado crítico en la Fundación Santa Fe tras recibir dos disparos en la cabeza y uno en la pierna durante un acto político en el barrio Modelia, en Bogotá.

Uno de los hallazgos más relevantes de las últimas horas es la identificación de la persona que originalmente compró el arma con la que se cometió el ataque. De acuerdo con información revelada por el diario El Tiempo, la pistola Glock calibre 9 milímetros fue adquirida legalmente en la ciudad de Arizona, Estados Unidos, el 6 de agosto de 2020. La Agencia de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF) de ese país confirmó que el comprador fue un hombre identificado como Charles Joe Anderson, quien realizó la transacción a través del distribuidor Aji Port.

Este dato es considerado clave por los investigadores, ya que permitirá rastrear el recorrido del arma desde su venta legal en territorio estadounidense hasta su llegada ilegal a Colombia, donde terminó en manos del menor de 14 años que fue capturado en flagrancia tras disparar contra Uribe Turbay. Las autoridades confirmaron que la pistola no está registrada ante el Departamento de Control y Comercio de Armas, Munición y Explosivos en Colombia, lo que evidencia su ingreso irregular al país.

Durante el análisis balístico, los peritos también destacaron una característica distintiva del arma: las vainillas expulsadas tienen un fondo de percusión rectangular, algo poco común, ya que la mayoría dejan una marca circular. Este detalle técnico puede ser útil para establecer conexiones con otros posibles hechos delictivos donde se haya utilizado un arma similar.

Por otro lado, las autoridades intentan dar con el paradero del celular que el menor portaba antes del atentado. Aunque testigos afirman que lo tenía en su poder, el dispositivo no fue hallado al momento de su captura, lo que ha generado inquietudes sobre si fue ocultado, robado o manipulado tras el ataque.

El menor continúa bajo custodia, recibiendo atención médica por heridas sufridas durante su aprehensión. Posteriormente será trasladado al búnker de la Fiscalía, donde avanzan las diligencias judiciales en su contra por tentativa de homicidio y porte ilegal de armas.

Mientras tanto, Miguel Uribe Turbay sigue internado en cuidados intensivos. Su estado de salud es crítico y su pronóstico reservado, según el último parte médico emitido por la Fundación Santa Fe.

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