La diputada del Atlántico, Alejandra Moreno, continúa liderando una investigación sobre el acceso a la justicia en el departamento, con el objetivo de fortalecer la ruta de atención que garantice confianza, protección y atención digna a las víctimas de violencia. Como parte de este trabajo, realizó una visita a la Comisaría de Familia del municipio de Juan de Acosta, donde evidenció condiciones preocupantes.
Según la diputada, la comisaría ha operado durante más de 10 años en condiciones de abandono y negligencia por parte de la Alcaldía y la Gobernación del Atlántico. Durante su recorrido, Moreno destacó problemas como infraestructura en mal estado, falta de baños, ausencia de espacios privados para atender a las víctimas y una conectividad deficiente, entre otras irregularidades que incumplen lo estipulado en la Ley 2126 de 2021, la cual regula el funcionamiento de estas instituciones.
“Es indignante que las víctimas tengan que ser atendidas en espacios que las hacen sentir incómodas y revictimizadas. No podemos permitir que esta situación continúe. Merecen atención digna, respeto y espacios adecuados que promuevan su confianza”, afirmó Moreno.
La diputada también se reunió con la presidenta de la Red de Comisarías y varios comisarios de familia para trazar estrategias que permitan mejorar las condiciones de estas instituciones en todo el departamento. Además, informó que ha enviado solicitudes formales a la Gobernación, alcaldías, Procuraduría y Ministerio de Justicia, exigiendo acciones inmediatas para solucionar las problemáticas encontradas.
“Seguiré recorriendo el departamento, supervisando la ruta de atención y luchando por los derechos de las mujeres víctimas de violencia, así como de los niños, niñas y adolescentes que sufren abuso y violencia. Es momento de que las instituciones actúen con responsabilidad y prioricen el bienestar de quienes más lo necesitan”, enfatizó la diputada.
Este es el segundo informe de su investigación, y se espera que en las próximas semanas continúe revelando el estado de las comisarías en otros municipios del Atlántico, con el propósito de generar cambios estructurales en la atención a las víctimas.
