Tres de los centros médicos más reconocidos de Colombia han sido puestos oficialmente en venta por el grupo estadounidense UnitedHealth Group, uno de los conglomerados de aseguramiento en salud más grandes del mundo. Se trata de la Clínica del Country y la Clínica La Colina, ubicadas en Bogotá, y la Clínica Portoazul, en Barranquilla. El anuncio marca un nuevo capítulo para el sistema de salud colombiano en medio de la crisis estructural que enfrenta el sector.
La decisión hace parte del retiro progresivo del grupo norteamericano de sus operaciones en Suramérica, proceso que comenzó en 2018 con su salida de Brasil, continuó con Perú a principios de 2025, y ahora avanza con Colombia y Chile. Según información revelada por el portal Consultor en Salud, las inversiones de UnitedHealth en la región arrojaron pérdidas acumuladas superiores a los 8.000 millones de dólares, lo que motivó la desinversión total.
El valor estimado de venta de las tres clínicas supera los 1.000 millones de dólares. Actualmente, hay interés de varios grupos internacionales como Acon Investments (Estados Unidos), Patria Investments (Brasil), Christus Health (Estados Unidos) y Grupo Auna (Perú), algunos con presencia en Colombia. También se han sumado actores nacionales como la Fundación Santa Fe, el grupo La Marly, aseguradoras locales y grupos familiares del sector sanitario.
Estas clínicas cuentan con un modelo patrimonial autónomo, lo que facilita su comercialización sin necesidad de incluir las aseguradoras asociadas al grupo, como Aliansalud y Colmédica. Sin embargo, no se descarta que algunos compradores propongan adquirir paquetes integrados, lo que abre interrogantes sobre el futuro del modelo de integración vertical entre EPS y prestadores.
Además de los impactos financieros, esta venta podría implicar transformaciones en la atención médica. Se prevé que el nuevo operador, dependiendo de su enfoque, podrá dar continuidad a los avances logrados por UnitedHealth Group o rediseñar la red de servicios priorizando nuevas tecnologías, áreas críticas como cuidados intensivos y especialidades como oncología.
Las propuestas formales de compra se recibirán en julio de 2025, luego de una fase de análisis iniciada en abril. Si el cronograma se cumple, la negociación podría cerrarse a finales de este año o comienzos de 2026. Aunque aún no hay certeza sobre los efectos que tendrá este cambio en la operación diaria de las clínicas, el proceso ya genera expectativa entre los usuarios, trabajadores de la salud y expertos del sistema.
Desde lavibrante.com seguiremos atentos a esta transacción clave para el sector salud, cuyo desenlace marcará un punto de inflexión en el modelo de atención privada en Colombia.