El Ejército Nacional confirmó la liberación de los dos soldados profesionales que habían sido secuestrados el pasado lunes 3 de noviembre en la vereda Getsemaní, zona rural del municipio de La Macarena, departamento del Meta. Los uniformados pertenecen al Batallón de Acción Directa y Reconocimiento N.º 12, adscrito a la Fuerza de Tarea Conjunta Omega, y fueron retenidos mientras apoyaban un operativo judicial del Cuerpo Técnico de Investigaciones (CTI) de la Fiscalía General de la Nación.

De acuerdo con las primeras versiones, el secuestro ocurrió cuando los militares fueron rodeados por un grupo de pobladores que, según las investigaciones iniciales, actuaron en coordinación con integrantes de las disidencias de las FARC que operan en la zona. Tras conocerse el hecho, el ministro de Defensa, Pedro Sánchez, responsabilizó directamente a las estructuras ilegales del frente comandado por alias Calarcá, asegurando que el secuestro “confirma la perversa alianza entre grupos criminales para fomentar el delito y el desorden en la región”.

Luego de su liberación, los dos soldados fueron trasladados a un centro médico para recibir valoraciones físicas y psicológicas, conforme al protocolo de atención humanitaria que se aplica en estos casos. El Ejército señaló que ambos se encuentran fuera de peligro y serán reincorporados a sus labores una vez se confirme su estabilidad física y emocional.

Las autoridades continúan desplegadas en la zona con el fin de mantener el control territorial y evitar nuevos hechos de violencia. En La Macarena, el Ejército sostiene presencia constante debido a la actividad de estructuras armadas que buscan dominar las rutas del narcotráfico, la minería ilegal y las redes de extorsión.

El Ejército Nacional reiteró su compromiso con la defensa de la soberanía, la seguridad de la población y la protección de sus hombres en el cumplimiento del deber, al tiempo que exigió el cese de cualquier acción violenta contra la Fuerza Pública en esta región del país.