En medio del ambiente de expectativa que rodea a la Universidad del Atlántico, el gobernador del departamento y presidente del Consejo Superior de la institución, Eduardo Verano, reiteró su llamado a restablecer la normalidad académica y administrativa, a la espera de las decisiones que adopte el Gobierno nacional frente a la crisis que mantiene suspendidas las actividades.

El pronunciamiento se da tras la difusión en medios de comunicación y redes sociales de la resolución 023896 del 11 de diciembre de 2025, expedida por el Ministerio de Educación Nacional. Frente a este documento, Verano aclaró que hasta el momento no ha recibido notificación oficial de dicha decisión administrativa, por lo que el Consejo Superior continúa atento a las actuaciones formales que correspondan.

El mandatario departamental aseguró que la prioridad es garantizar el derecho a la educación de miles de estudiantes y permitir el regreso a las clases en condiciones de estabilidad. Señaló que, aunque no existe aún una comunicación directa por parte del Ministerio, se mantiene el compromiso institucional de acompañar cualquier medida que conduzca a la normalización del servicio educativo y al levantamiento del paro que afecta a la comunidad universitaria.

Verano subrayó que la administración departamental y el Consejo Superior actúan con respeto por la institucionalidad y los procedimientos legales, razón por la cual esperan que el Ministerio de Educación defina y ponga en marcha las acciones necesarias para resolver la situación. En ese sentido, insistió en que el objetivo común debe ser proteger el proceso formativo y evitar mayores afectaciones al calendario académico.

La resolución en mención establece el reemplazo del rector de la Universidad del Atlántico dentro del marco de la vigencia especial contemplada en la resolución 022126 del 14 de noviembre de 2025, una medida que ha generado reacciones y debate en distintos sectores. Mientras se surten los trámites oficiales, la Gobernación del Atlántico reiteró su disposición a trabajar de manera articulada con el Gobierno nacional para que la universidad retome su funcionamiento habitual y se restablezca la tranquilidad en el campus.

Desde la presidencia del Consejo Superior se hizo un llamado a la calma y al diálogo, con el fin de que las decisiones que se adopten permitan superar la coyuntura actual y devolverle a la Universidad del Atlántico el ambiente de normalidad que requiere para cumplir su misión académica y social.