Ciénaga, Magdalena, volvió a convertirse en escenario de memoria y dignidad con la conmemoración de los 97 años de la Masacre de las Bananeras, uno de los hechos más dolorosos en la historia laboral y social del país. En el Parque Plaza del Centenario, el presidente Gustavo Petro encabezó un acto solemne dedicado a recordar a los centenares de obreros asesinados los días 5 y 6 de diciembre de 1928 por reclamar derechos básicos frente a la United Fruit Company.

El Ministerio del Trabajo destacó la relevancia histórica de este episodio, calificándolo como un punto de inflexión en la lucha sindical y un dolor aún latente en la memoria colectiva del país. La entidad recordó que la masacre sigue siendo un símbolo de resistencia y un llamado permanente a garantizar condiciones laborales dignas para todas y todos.

Durante el evento, descendientes de los trabajadores fallecidos reconocieron la presencia del mandatario como un acto de reparación simbólica y un mensaje claro de que el Estado debe garantizar que tragedias como esta no vuelvan a repetirse.

En el marco de la conmemoración, el Gobierno nacional, junto a Fecode y las centrales sindicales CUT, CGT y CTC, presentó ante el Congreso un proyecto de ley orientado a reivindicar oficialmente a las víctimas y a fortalecer la memoria histórica sobre los hechos ocurridos en 1928. La iniciativa busca que el país asuma, desde su institucionalidad, la responsabilidad de recordar y dignificar a quienes fueron silenciados por exigir lo mínimo: justicia laboral.

La masacre, que dejó centenares de muertos y familias desplazadas, fue consecuencia directa de la represión estatal contra obreros que exigían mejores condiciones de trabajo, salarios justos y derechos fundamentales. Hoy, casi un siglo después, Colombia continúa reconstruyendo esa memoria con la convicción de que la dignidad laboral es un pilar esencial para la paz y la democracia.