PUBLICIDAD

Estados Unidos endurece controles migratorios y exigirá registro biométrico a viajeros extranjeros

Viajar a Estados Unidos desde finales de diciembre implica nuevas exigencias para los visitantes internacionales. Desde este 26 de diciembre comenzó a regir un ajuste en los protocolos migratorios que modifica la forma en la que los extranjeros ingresan y salen del país, con un énfasis mayor en la verificación de identidad.

La medida, anunciada por el Department of Homeland Security, introduce la obligatoriedad del registro biométrico tanto en el momento de entrada como al momento de salida del territorio estadounidense. El cambio fue oficializado mediante su publicación en el Registro Federal y será implementado de manera progresiva en todos los puntos de control migratorio.

El nuevo procedimiento contempla la captura de datos biométricos como fotografías, huellas dactilares y, en algunos casos, reconocimiento facial. Con esta información, las autoridades buscan comparar los registros de ingreso y salida para confirmar la identidad del viajero y verificar el cumplimiento del tiempo de permanencia autorizado.

A diferencia del sistema anterior, en el que la verificación se concentraba principalmente en la llegada, ahora el control se extiende de forma obligatoria al momento de abandonar el país. La normativa elimina las excepciones existentes y amplía su alcance a todos los extranjeros, incluidos turistas, estudiantes, trabajadores temporales, residentes con permisos especiales, menores de edad y adultos mayores.

El registro biométrico se aplicará en aeropuertos internacionales, fronteras terrestres y puertos marítimos, con el objetivo de unificar los protocolos de seguridad en todo el territorio. Según las autoridades, esta base de datos permitirá detectar casos de sobreestadía, prevenir el uso de documentos falsos, corregir inconsistencias en los registros migratorios y fortalecer la lucha contra delitos asociados a la movilidad internacional.

Aunque el Gobierno estadounidense defiende la medida como una herramienta clave para reforzar la seguridad nacional, expertos en migración y derecho han señalado la importancia de vigilar su implementación. Entre las principales preocupaciones figuran el tiempo de conservación de los datos biométricos, los mecanismos para corregir posibles errores de identidad y las garantías para proteger la privacidad de los viajeros.

El desafío, coinciden los especialistas, será mantener un equilibrio entre el fortalecimiento de los controles migratorios y el respeto a los derechos individuales de quienes ingresan y salen del país, en una temporada marcada por un alto flujo de visitantes internacionales.