El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, endureció este domingo su postura frente a Hamás al lanzar lo que calificó como una “última advertencia” para que el grupo islamista acepte un acuerdo que permita la liberación de los rehenes israelíes retenidos en Gaza.
“Todo el mundo quiere que los rehenes vuelvan a casa. Todo el mundo quiere que esta guerra termine. Los israelíes han aceptado mis condiciones. Es hora de que Hamás también las acepte”, manifestó el mandatario a través de su red Truth Social.
Trump insistió en que las consecuencias de no aceptar la propuesta serán severas y dejó claro que no habrá más oportunidades de negociación. “Es la última advertencia. No habrá más”, agregó, en un mensaje que rápidamente generó reacciones internacionales.
La advertencia del presidente se conoció después de que el enviado especial de Estados Unidos para Oriente Medio, Steve Witkoff, hiciera llegar la semana pasada a Hamás una nueva propuesta de acuerdo mediante un activista israelí por la paz, según reveló el portal Axios. El plan no solo busca la liberación de los rehenes, sino también la posibilidad de establecer un alto el fuego en la región.
El viernes, el propio Trump había confirmado que su Gobierno mantenía negociaciones activas con Hamás. “Estamos en negociaciones muy profundas. Les dijimos: déjenlos salir a todos ahora mismo y les irá mucho mejor”, señaló en declaraciones ofrecidas a la prensa desde el Despacho Oval.
La crisis humanitaria en Gaza sigue en aumento desde que estalló la guerra el 7 de octubre de 2023, tras los ataques de Hamás contra Israel. De acuerdo con cifras de las autoridades sanitarias locales, controladas por el grupo islamista, más de 64.000 palestinos han perdido la vida como consecuencia de las ofensivas israelíes. Además, 387 personas, entre ellas 138 niños, han fallecido por causas relacionadas con la desnutrición y el hambre.
El nuevo pronunciamiento de Trump se suma a la presión internacional para alcanzar un acuerdo que alivie la crisis y permita el regreso de los rehenes, en un momento en el que la comunidad internacional reclama medidas urgentes para contener la escalada de violencia en Medio Oriente.