PUBLICIDAD

Mauricio Lizcano exige acción inmediata del Estado tras atentado con drones en Calamar, Guaviare

El precandidato presidencial Mauricio Lizcano rechazó de manera contundente el atentado con drones explosivos ocurrido en el municipio de Calamar, Guaviare, donde fueron atacados el alcalde Farid Camilo Castaño, la estación de Policía y un batallón del Ejército Nacional. Los hechos dejaron al menos tres personas heridas y generaron pánico entre la población.

Lizcano calificó el ataque como un grave acto de terrorismo que atenta contra la institucionalidad y la tranquilidad ciudadana, e hizo un llamado urgente al Gobierno Nacional para que refuerce la presencia del Estado en la región. “Nos unimos al rechazo absoluto del atentado perpetrado contra las autoridades en Calamar. Exigimos la activación inmediata de todos los mecanismos necesarios para restablecer la tranquilidad y proteger la vida de los integrantes de la Fuerza Pública”, manifestó el precandidato.

El político advirtió que la violencia se está convirtiendo en una constante en los territorios más apartados del país, y señaló que es inaceptable que los grupos armados continúen desafiando al Estado mediante acciones terroristas. “Colombia no puede seguir tolerando estos actos que amenazan la institucionalidad y ponen en riesgo a las comunidades. Es momento de recuperar el control territorial y garantizar la seguridad en cada rincón del país”, afirmó.

De acuerdo con las autoridades del Guaviare, uno de los drones explosivos fue derribado a tiempo, evitando una tragedia mayor. Tanto el alcalde como los uniformados lograron salir ilesos del ataque.

Lizcano reiteró su compromiso con la defensa de la institucionalidad y la protección de las autoridades locales, líderes sociales y comunidades rurales. “No podemos permitir que el país retroceda hacia los tiempos más oscuros del conflicto. La seguridad debe ser prioridad nacional”, concluyó.

El hecho refleja la creciente amenaza que enfrentan los municipios del suroriente del país, donde las disidencias armadas han intensificado sus ataques en medio de los esfuerzos del Gobierno por mantener el orden público y la gobernabilidad en estas zonas.