El reconocido futbolista argentino, vivió un inesperado contratiempo al ser detenido por la Policía Migratoria de China en el aeropuerto de Pekín. La razón de su detención se debió a problemas relacionados con su pasaporte y la falta de una visa válida para ingresar al país.
El astro del fútbol, quien se encontraba viajando para unirse a la concentración de la selección argentina, experimentó un percance en su llegada a China. Las autoridades migratorias, al revisar su documentación, identificaron la ausencia de los requisitos necesarios para su ingreso legal al país.
Tras un par de horas de incertidumbre y trámites administrativos, Lionel Messi logró regularizar su situación migratoria y obtener los documentos adecuados para su estadía en China. Con todo en orden, pudo finalmente unirse a la concentración albiceleste y continuar con sus compromisos futbolísticos.