La escasez de medicamentos en Colombia ha alcanzado niveles alarmantes, afectando a millas de pacientes que dependen de las Entidades Promotoras de Salud ( EPS ) para acceder a tratamientos esenciales. La falta de pago a laboratorios y gestores farmacéuticos ha generado un desabastecimiento crítico en el sistema de salud, obligando a muchos colombianos a adquirir los medicamentos de su propio bolsillo. Esta situación, que se agrava día a día, pone en evidencia una crisis estructural en la financiación del sector.
El problema radica en una cadena de deudas que comienza con la desfinanciación de las EPS, las cuales no pueden cumplir con los pagos a los gestores farmacéuticos. Estos, a su vez, enfrentan bloqueos por parte de laboratorios nacionales e internacionales debido a la acumulación de deudas. En diciembre de 2024, el Ministerio de Salud informó que 808 medicamentos distribuidos a través del canal institucional estaban en situación de escasez o desabastecimiento, incluyendo fármacos esenciales como insulina y antibióticos para tratar infecciones respiratorias graves.
Pacientes enfrentan dificultades extremas para acceder a medicamentos
La crisis ha impactado directamente a los pacientes, quienes deben recorrer largas distancias y esperar durante horas para intentar obtener sus medicamentos. Casos como por ejemplo el de Jairo Sanabria, un adulto mayor en Bogotá que, tras esperar toda una mañana en una farmacia de Audifarma, no pudo conseguir el enalapril que necesita para controlar su hipertensión. “Uno va a buscar a la farmacia y no están. Los he tenido que comprar”, expresó Sanabria.
Deudas millonarias y bloqueos en la cadena de suministro
El problema financiero detrás de esta crisis es monumental. Las EPS adeudan aproximadamente 500.000 millones de pesos colombianos a los gestores farmacéuticos, quienes, a su vez, enfrentan bloqueos por parte de laboratorios debido a la falta de pago. En septiembre de 2024, un documento de la Superintendencia de Salud reveló que nueve de los 24 gestores farmacéuticos más importantes del país reportaron bloqueos por parte de laboratorios. Entre las empresas afectadas se encuentran Audifarma, Colsubsidio, Cafam y Cruz Verde, que son responsables de gran parte de la dispensación de medicamentos en Colombia.
Laboratorios multinacionales como Novartis , Merck , Pfizer y Boehringer Ingelheim , así como empresas nacionales como Tecnoquímicas, han implementado bloqueos totales o parciales. Esto ha afectado la disponibilidad de principios activos esenciales como pregabalina, clonazepam, insulina y antibióticos, entre otros.
Impacto en el mercado y en los laboratorios farmacéuticos
La crisis no solo afecta a los pacientes y las EPS, sino también a los laboratorios farmacéuticos, tanto nacionales como internacionales. Clara Isabel Rodríguez, directora ejecutiva de la Asociación Farmacéutica de la Industria Colombiana ( Ascif ), explicó que el mercado institucional, que abastece a las EPS, enfrenta un déficit financiero significativo. Según Rodríguez, las deudas acumuladas por los laboratorios oscilan entre 400.000 y 500.000 millones de pesos, y los tiempos de pago, que solían ser de 30 a 90 días, ahora se extienden hasta 180 días.
Rodríguez también señaló que el consumo de medicamentos ha aumentado un 128 % desde la pandemia de COVID-19, mientras que solo el 30 % de los recursos de la Unidad de Pago por Capitación ( UPC ) se destina a medicamentos. Ante esta situación, algunos laboratorios han comenzado a explorar el mercado de exportaciones como una posible salida, aunque este aún no representa una solución significativa. La directora advirtió que la crisis pone en riesgo más de 50.000 empleos formales en el sector farmacéutico.