La salud mental se ha convertido en una prioridad en el departamento del Atlántico, y los resultados son esperanzadores. Gracias a la implementación de estrategias como el programa Habla y Te Sanas, la Secretaría de Salud departamental reportó una disminución del 14,1 % en los intentos de suicidio entre enero y mayo de 2025, comparado con el mismo periodo del año anterior.
En total, se han registrado 306 casos en lo corrido del año, frente a 356 reportados en 2024. De ellos, 96 corresponden a hombres y 210 a mujeres. La mayor concentración de casos se presenta entre los 7 y 21 años, lo que ha llevado a priorizar intervenciones en entornos escolares y hogares.
La secretaria de Salud Pública, Olinda Oñoro Jiménez, indicó que el departamento ha convocado a EPS, hospitales y alcaldías a mesas técnicas para identificar los retos en la atención, fortalecer la red de salud mental y prevenir situaciones de riesgo. Esta articulación permitió detectar un crecimiento significativo en diagnósticos de salud mental en la primera infancia, así como más de 240 casos de autismo solo en el municipio de Soledad.
Además, se identificó que los principales detonantes de los intentos de suicidio siguen siendo los problemas familiares (40,3 %), seguido por conflictos de pareja, situaciones económicas, escolares y de salud crónica. La situación territorial también se analiza con lupa, con algunos municipios como Sabanalarga, Galapa y Candelaria manteniéndose por encima del promedio de incidencia.
Desde el Gobierno departamental, también se han reforzado las líneas de atención y programas de apoyo. La línea de atención psicológica 24/7 (3176218394) continúa creciendo en cobertura y demanda, y el programa Habla y Te Sanas incluye primeros auxilios psicológicos, seguimiento y redirección a servicios especializados.
El plan de acción involucra a la Secretaría de Educación, Consejería para Personas con Discapacidad y rectores de colegios, con capacitaciones, rutas de atención y acompañamiento en universidades. Se suma también el Programa de Orientación y Apoyo Familiar (POAF) para brindar apoyo a familias que han enfrentado intentos de suicidio o han perdido a un ser querido.
“El mensaje es claro: hablar sana. La salud mental necesita atención integral, prevención y acompañamiento permanente. Nuestra prioridad es que cada persona sepa que no está sola y que puede encontrar ayuda”, concluyó Eduardo Verano, gobernador del Atlántico.
La invitación del gobierno departamental es a continuar generando conciencia, tejiendo redes de apoyo y promoviendo espacios seguros donde hablar sea siempre el primer paso para sanar.