La Cámara Colombo Americana (AmCham Colombia) confirmó que Colombia continuará enfrentando un arancel del 10% para sus productos que ingresen a Estados Unidos, tras el análisis técnico de la nueva Orden Ejecutiva firmada el 31 de julio de 2025 por el presidente estadounidense. De acuerdo con el pronunciamiento de la entidad, “quedamos con el mismo 10%, no hubo cambio por el momento”.
Según explicó AmCham, Colombia no aparece en el Anexo I de la orden ni ha sido clasificada como país con compromisos sustanciales en materia de defensa o seguridad nacional con Estados Unidos, ni tampoco como país transgresor. Esto la mantiene en el grupo base de naciones sujetas al arancel general del 10%, en cumplimiento de la EO 14257 del 2 de abril de 2025.
“Colombia no se castiga ni se premia en esta ocasión”, afirmó María Claudia Lacouture, presidenta de AmCham Colombia, al detallar que el país no reporta avances significativos en reciprocidad arancelaria o alineación estratégica con EE.UU.
Estados Unidos determinó aplicar aranceles diferenciados: un 10% a países con superávit comercial, como Colombia, y tarifas más altas —de hasta el 40%— a naciones como Myanmar, India, Indonesia o Vietnam. Por su parte, México conserva ventajas dentro del T-MEC en algunos productos, aunque continúa con tarifas del 25% en otros no exentos.
Recomendaciones estratégicas para Colombia
AmCham sugirió al país aprovechar esta coyuntura para fortalecer su competitividad frente a naciones afectadas por alzas arancelarias, especialmente en sectores como flores, café industrializado, banano y confecciones.
Además, instó a que se exploren canales diplomáticos para negociar un trato preferencial similar al que ha logrado México y se fortalezcan los sistemas de trazabilidad y certificación de origen, como los esquemas del Plan Vallejo o Zonas Francas, con el fin de evitar posibles sanciones comerciales.
También recomendó monitorear de cerca el curso legal de esta orden en tribunales de EE.UU., ya que su validez está siendo debatida bajo la ley IEEPA. Un fallo en contra podría modificar el esquema arancelario actual, lo que exige vigilancia activa por parte de las instituciones colombianas.
Con este escenario, Colombia se mantiene en terreno estable pero con oportunidades latentes para mejorar su posición comercial ante uno de sus principales socios estratégicos.