La tarde en la Plaza Monumental quedó grabada en la memoria de los aficionados con el indulto de ‘Cadenero’, un ejemplar único que hizo vibrar cada rincón del ruedo. El toro, marcado con el número 197 y con un peso de 460 kilos, destacó por su imponente presencia y su bravura sin igual, características propias de la ganadería de Ernesto Gutiérrez Arango.
Con una estampa majestuosa y una embestida perfecta, ‘Cadenero’ ofreció un espectáculo inolvidable. Aunque algunos podrían señalar su lentitud inicial, cada embestida demostró su entrega total. Por ambos pitones, respondió con recorrido largo y preciso, mientras el torero Román supo manejar su bravura con temple, creando una faena que se ganó el reconocimiento del público y los jueces.
El indulto no solo honró a ‘Cadenero’, sino también los 70 años de pasión taurina que representa la ganadería Ernesto Gutiérrez. Este toro, considerado ya una leyenda, se convirtió en símbolo de perfección y emoción, consolidándose como el “toro inmortal”.
El desarrollo de la corrida
La jornada no estuvo exenta de emociones. David Galván, quien abrió la tarde, lidió con ejemplares de presentación cuestionable, pero su destreza le permitió arrancar dos orejas y asegurar su lugar en la puerta grande. Con un temple admirable, el gaditano dominó las carencias de sus adversarios y logró momentos de gran conexión con el público.
Román, por su parte, tuvo una actuación destacada con ‘Cadenero’. Sus naturales y mandos sobre la muleta hicieron justicia a la bravura del toro. Aunque su primer toro careció de fuerza, el torero español logró crear momentos de ritmo y emoción en los tendidos.
Juan Sebastián Hernández enfrentó una tarde complicada. Su primer toro causó angustia en los tendidos al arrollar al banderillero Ricardo Santana, quien sufrió un fuerte golpe en la cabeza contra un burladero y fue trasladado al Hospital Santa Sofía. A pesar de los contratiempos, Hernández mostró oficio y valentía ante toros de complicada lidia, recibiendo aplausos del público.
Momentos para la historia
La tarde fue un contraste de emociones. Desde la alegría por el indulto de ‘Cadenero’ hasta la preocupación por el estado de salud de Santana, la Monumental vivió una jornada intensa. Entre aplausos, pitos y silencio reflexivo, quedó demostrado que la tauromaquia sigue siendo un espectáculo de pasión y entrega.
Ficha de la corrida:
- Toros: Un toro de Ernesto Gutiérrez Arango, bravo y de impecable presentación, indultado. Cinco toros de Dosgutiérrez, con escasa presencia y genio desigual. Pesos: 450, 444, 442, 440, 460 y 442 kg.
- Toreros:
- David Galván (obispo y oro): Dos orejas y palmas.
- Román (sangre de toro y oro): Palmas tras aviso y dos orejas simbólicas.
- Juan Sebastián Hernández (blanco y oro): Palmas tras aviso y palmas tras dos avisos.
- Asistencia: Plaza casi llena.
- Detalles: Buen clima y ovaciones para ‘Cadenero’.
Parte médico:
Al cierre de la jornada, no se había emitido un parte médico oficial sobre el estado de salud del banderillero Ricardo Santana.
Román, el protagonista del indulto: La faena al quinto toro marcó el clímax de la corrida. Con naturales llenos de elegancia y poder, Román selló su lugar en la historia taurina de la Monumental.
La Monumental celebra un nuevo capítulo de su legado taurino, donde ‘Cadenero’ queda inmortalizado como símbolo de bravura y perfección.