La Gobernación del Atlántico continúa transformando hogares y mejorando la calidad de vida de cientos de familias a través del programa de subsidios de vivienda “Mi Casa Bacana”. En esta oportunidad, el municipio de Baranoa es protagonista con una inversión inicial de $1.200 millones que beneficiará a 110 familias del barrio Santa Helena.
Esta primera etapa contempla 150 mejoramientos en la zona urbana de Baranoa y se extenderá próximamente al área rural con intervenciones en los corregimientos de Campeche, Sibarco y Pital de Megua, para completar un total de 250 mejoramientos en todo el municipio.
Los trabajos se enfocan en la renovación de baños y cocinas, reemplazo de pisos de tierra por superficies permanentes y adecuaciones estructurales en sala, comedor y habitaciones. Estas intervenciones buscan garantizar espacios dignos, seguros y saludables para las familias beneficiadas.
“Mi Casa Bacana es más que un programa de mejoramientos, es una apuesta integral por la dignidad y el bienestar. A través de la legalización de títulos de propiedad, el acceso a energía limpia con paneles solares y la conectividad digital con Mi Casa Bacana Digital, estamos impulsando el desarrollo social y económico de las comunidades”, afirmó el gobernador Eduardo Verano.
Durante la jornada de inicio de obras en Santa Helena, Miladys Hernández, una de las beneficiarias, expresó su emoción: “Este ha sido el mejor regalo de cumpleaños. Mi casa necesitaba una transformación completa, sobre todo para el bienestar de mi padre que tiene una discapacidad. Gracias a este programa, vamos a vivir con más comodidad y dignidad”.
La Subsecretaria de Vivienda, Electrificación y Espacio Público, Rocío Jiménez, explicó que las familias fueron seleccionadas mediante convocatorias en coordinación con los entes territoriales, y posteriormente se realizaron visitas casa a casa para evaluar las necesidades y diseñar los planes de intervención.
“Este programa cambia radicalmente la vida de las personas. Al mejorar sus viviendas, se mejora también su salud, su entorno y su futuro. Es una muestra del compromiso de esta administración con el bienestar de los atlanticenses”, señaló la funcionaria.
Por su parte, el alcalde de Baranoa, Edinson Palma, destacó la focalización efectiva de los subsidios: “Es gratificante ver cómo estas ayudas llegan justo donde se necesitan. Cada una de estas familias ahora tiene la oportunidad de vivir mejor y con más dignidad”.
Mi Casa Bacana es una de las apuestas sociales más ambiciosas del departamento y en su primera fase impactará a 4.000 viviendas en todo el Atlántico, consolidándose como una herramienta de transformación profunda en la vida de miles de ciudadanos.