Un eventual incremento del 19 % en el salario mínimo para 2026 no solo tendría impacto en los ingresos de los trabajadores activos, sino también en los apoyos económicos dirigidos a quienes pierdan su empleo. Uno de los beneficios que se vería directamente ajustado es el subsidio de desempleo, un auxilio clave para miles de personas que atraviesan periodos de cesantía en Colombia.

Este apoyo hace parte del Mecanismo de Protección al Cesante y es administrado por las cajas de compensación familiar. Su propósito es brindar un alivio económico temporal, garantizar la continuidad en salud y pensión y acompañar al beneficiario en procesos de orientación y reinserción laboral.

Para acceder al subsidio, el solicitante debe haber perdido su empleo o finalizado su contrato, no contar con otras fuentes de ingreso y haber realizado aportes a una caja de compensación durante los últimos tres años. En el caso de trabajadores dependientes, se exigen al menos 360 días de cotización, mientras que para independientes el requisito es de 720 días. Además, es obligatorio cumplir la ruta de empleo definida por la caja correspondiente.

El componente económico del subsidio equivale a 1,5 salarios mínimos mensuales legales vigentes, distribuidos en cuatro pagos mensuales decrecientes. Actualmente, el esquema contempla un desembolso del 40 % en el primer mes, 30 % en el segundo, 20 % en el tercero y 10 % en el último mes.

Si el salario mínimo subiera un 19 % en 2026 y se toma como referencia un salario base cercano a 1.300.000 pesos, este pasaría aproximadamente a 1.547.000 pesos. Con ese escenario, el valor total del subsidio de desempleo ascendería a cerca de 2.320.500 pesos, correspondientes a 1,5 salarios mínimos.

La distribución mensual quedaría así: en el primer mes, el beneficiario recibiría alrededor de 928.200 pesos; en el segundo, unos 696.150 pesos; en el tercero, cerca de 464.100 pesos; y en el cuarto mes, aproximadamente 232.050 pesos. Estas cifras son estimaciones y podrían variar según el salario mínimo definitivo que se fije para 2026.

El ajuste del subsidio representaría un mayor respaldo económico para quienes pierdan su empleo, aunque también implicaría mayores recursos por parte del sistema. Mientras se define el aumento oficial del salario mínimo, las cajas de compensación y los trabajadores siguen atentos a los cambios que puedan impactar este mecanismo de protección social.