Este miércoles 15 de febrero, en Gualaca al oeste de Panamá un autobús que transportaba migrantes cayó por un precipicio dejando como saldo 39 personas muertas y más de 20 heridos.

Edilberto Armuelles, bombero que atendió el accidente, informó que el hecho ocurrió a las 4:30 hora local.

Cinco menores de edad se encuentran entre los heridos, dos con lesiones graves según información de medios locales. Mientras tanto, no se tienen detalles sobre la identidad de las personas que perdieron la vida.

El bus al momento de los hechos llevaba 66 personas migrantes que iban a ser reubicadas en un refugio al Oeste de la provincia costera de Chiriquí, en los límites con Costa Rica.

El presidente de la República de Panamá compartió en su cuenta de Twitter el siguiente mensaje: «El Gobierno Nacional extiende sus condolencias a los familiares de los fallecidos en este accidente, y reitera su compromiso con seguir brindando ayuda humanitaria y condiciones dignas para enfrentar la migración irregular». También informó que el Gobierno de Panamá continúa brindando «todas las atenciones médicas a los heridos».

Entre las víctimas mortales se encuentran personas de Cuba y hasta el momento se han identificado 22 personas de Ecuador.

Por su parte, el ministro de Seguridad Pública, Juan Pino, lamentó el hecho y confirmó que esperan los resultados de las investigaciones para identificar la causa de este trágico accidente.

Según primeras versiones el conductor del bus intentó girar, pero perdió el control y chocó con otro auto lo que ocasionó que el bus cayera por el precipicio.