La actuación de una multinacional europea quedó en el centro del debate internacional luego de que activistas colombianos realizaran una manifestación pacífica frente a la sede global de SHV Holdings, en Utrecht, Países Bajos. La protesta tuvo como objetivo exigir que la compañía adopte en Colombia los mismos estándares de bienestar animal que ya aplica en Europa, especialmente en lo relacionado con la venta de huevos producidos por gallinas confinadas en jaulas en batería

La acción se desarrolló en el marco de la campaña Tiendas Bajo la Lupa, impulsada por la organización internacional Sinergia Animal, que desde comienzos de 2025 viene señalando a Makro Colombia, filial de SHV Holdings en Suramérica, por continuar comercializando huevos provenientes de sistemas de producción considerados altamente crueles para los animales. Este tipo de jaulas, prohibidas en varios países europeos, limitan severamente el comportamiento natural de las gallinas y generan condiciones de estrés permanente.

La protesta marcó un hecho sin precedentes, al convertirse en la primera acción internacional liderada por activistas colombianos directamente frente a la casa matriz de una empresa que, según denuncian, mantiene dobles estándares de sostenibilidad y bienestar animal entre Europa y América Latina. Para Sinergia Animal, esta diferencia contradice el discurso ambiental y social que SHV promueve en otros mercados.

Desde la organización señalaron que durante más de dos años han intentado establecer diálogos con Makro Colombia para impulsar una transición hacia sistemas libres de jaulas, sin obtener compromisos concretos. Ante la falta de avances, decidieron llevar el reclamo hasta Países Bajos, donde se toman las decisiones estratégicas de la compañía. La ONG insiste en que la coherencia corporativa es clave para la credibilidad de una empresa global que se presenta como líder en sostenibilidad.

El papel de los supermercados también fue uno de los puntos centrales del reclamo. De acuerdo con Sinergia Animal, estas cadenas tienen un impacto determinante en la industria del huevo, ya que concentran gran parte de la comercialización. Un cambio en sus políticas de abastecimiento podría traducirse en mejoras directas para millones de animales en la región.

Las críticas hacia Makro Colombia se apoyan en los resultados del informe Tiendas Bajo la Lupa, publicado en febrero de 2025, donde la cadena fue ubicada entre las peores evaluadas al no cumplir con ninguno de los criterios relacionados con la adopción de políticas libres de jaulas, transparencia ni planes de transición. Aunque la empresa ofrece algunos productos provenientes de sistemas alternativos, continúa comercializando huevos de gallinas enjauladas, uno de los métodos más cuestionados por organizaciones de bienestar animal.

Las cifras regionales refuerzan la preocupación. En América Latina, cerca del 87 por ciento de las gallinas utilizadas por la industria del huevo permanecen confinadas en jaulas, lo que equivale a más de 535 millones de aves. En Colombia, la industria explota a más de 60 millones de gallinas, y hasta hace pocos años, más de la mitad seguían sometidas a este sistema. El país, además, se encuentra entre los mayores consumidores de huevo per cápita de la región.

Sinergia Animal reiteró su llamado a SHV Holdings para que extienda a Colombia los mismos estándares que ya rigen en Europa y adopte una política pública de transición hacia sistemas libres de jaulas. Para la organización, el caso de Makro se ha convertido en un símbolo de la necesidad de exigir coherencia ética a las multinacionales que operan en distintos países bajo un mismo nombre, pero con reglas distintas según el mercado.