Barranquilla escribió una nueva página en su historia urbana con la apertura oficial de la Luna del Río, una imponente noria de 65 metros de altura que desde el Gran Malecón se convierte en el nuevo ícono turístico, cultural y económico de la ciudad. A orillas del río Magdalena, este proyecto marca un punto de encuentro entre el pasado, el presente y el futuro de la capital del Atlántico, ofreciendo una mirada distinta de la ciudad desde las alturas.

Durante el acto inaugural, el alcalde Alejandro Char destacó el significado de esta obra para la proyección de Barranquilla, resaltando que la Luna del Río no solo es una atracción mecánica, sino un motor de desarrollo. Según el mandatario, este tipo de infraestructura responde a la forma como hoy el mundo visita las ciudades, motivado por el entretenimiento, el deporte y las experiencias urbanas, lo que impacta de manera directa sectores como la gastronomía, el comercio, la hotelería y el turismo en general.

La noria, considerada la más grande de Colombia y una de las más destacadas de Latinoamérica, fortalece la reconexión de Barranquilla con el río Magdalena y consolida una nueva manera de vivir el espacio público. Desde sus cabinas, los visitantes podrán disfrutar de una vista panorámica de 360 grados que integra el paisaje natural, el crecimiento urbano y los principales atractivos del Gran Malecón, reafirmando el carácter abierto y vibrante de la ciudad.

Barranquilla, te presento la joya que será nuestro orgullo de ahora en adelante!🌙🎡

La #LunaDelRío, que desde hoy se convierte en un nuevo motivo para encontrarnos, soñar y ver cómo nuestra ciudad sigue creciendo a otro nivel, mientras nos seguimos enamorando de ella.

Aquí,… pic.twitter.com/gsmXYMARLl

— Alejandro Char (@AlejandroChar) December 13, 2025

Proyecciones oficiales indican que la Luna del Río podría atraer entre 150.000 y 200.000 visitantes al año, dinamizando la economía local y generando un impacto positivo en las cadenas de valor asociadas al turismo, el transporte, la recreación y las industrias creativas. Actualmente, estos sectores generan cerca de 200.000 empleos en Barranquilla y su área metropolitana, cifra que se espera fortalecer con la puesta en marcha de este nuevo atractivo.

La operación de la Luna del Río se realizará de martes a domingo, entre las 10:00 de la mañana y las 10:00 de la noche, con cierre los lunes y los martes posteriores a un lunes festivo. El recorrido tendrá una duración aproximada de 15 a 20 minutos, y las boletas podrán adquirirse tanto en taquilla como a través de los canales digitales autorizados. Durante los primeros días, el valor del ingreso será de 15.000 pesos por persona, mientras que a partir del 15 de diciembre se implementarán tarifas diferenciales para niños, estudiantes, personas con discapacidad y adultos mayores.

Con 44 cabinas climatizadas y capacidad para 264 personas por viaje, la noria se levanta sobre un área cercana a los 20.000 metros cuadrados, donde se integran zonas verdes, espacio público y futuras áreas comerciales. La estructura, que pesa 240 toneladas, fue construida por la firma italiana Fabbri Park, reconocida a nivel mundial por su experiencia en atracciones mecánicas, en un proceso que incluyó la capacitación de ingenieros locales y la participación de mano de obra de la región.

La inversión complementaria del proyecto superó los 7.000 millones de pesos, destinados a la adecuación del parque, bulevares y entornos urbanos que rodean la rueda, consolidando este sector como un nuevo punto de encuentro para propios y visitantes.

Con la Luna del Río, Barranquilla reafirma su apuesta por una ciudad moderna, creativa y conectada con su entorno natural, fortaleciendo el orgullo barranquillero y sumando un nuevo escenario que invita a disfrutar, cuidar y proyectar al mundo el potencial de la Puerta de Oro de Colombia.