En una jornada cargada de gratitud y reconocimiento, el gobernador del Atlántico, Eduardo Verano de la Rosa, exaltó la labor de cientos de voluntarios que, desde diferentes organismos de socorro, sostienen con su trabajo la estabilidad y la capacidad de respuesta del departamento frente a las emergencias.
El acto de conmemoración del Día Internacional del Voluntario se llevó a cabo en el auditorio de la Escuela de Suboficiales ARC Barranquilla, donde representantes de la Defensa Civil, la Cruz Roja y otros equipos de apoyo recibieron un homenaje por su aporte invaluable al bienestar colectivo.
Verano destacó que el voluntariado se ha convertido en una pieza fundamental en los momentos más críticos que ha enfrentado la región Caribe. Recordó episodios como la emergencia en el sur del Atlántico en 2010 y la tragedia ocasionada por el huracán Iota en San Andrés, donde los voluntarios fueron la primera línea de respuesta.
“El verdadero valor de una sociedad se mide cuando sus ciudadanos ayudan sin esperar nada a cambio. Ustedes son esa fuerza que sostiene la esperanza en medio de la adversidad”, expresó el mandatario, quien aseguró que el reconocimiento recibido en el evento pertenece, en realidad, a cada voluntario que entrega tiempo, conocimiento y corazón para salvar vidas y proteger comunidades.
Durante la ceremonia, el gobernador reafirmó el compromiso institucional de continuar fortaleciendo la Unidad de Gestión del Riesgo y los mecanismos de apoyo para los organismos de socorro. “El Atlántico cuenta con ustedes, y ustedes cuentan con nosotros. Seguiremos trabajando para fortalecer su labor”, añadió.
El viceministro del Interior, Jaime Berdugo, también resaltó el papel irreemplazable del voluntariado, señalando que su presencia en los desastres es un símbolo de empatía y humanidad. “El voluntario es quien llega primero, quien salva vidas y quien cuida lo que más importa. Hoy les rendimos el homenaje que merecen”, expresó.
La conmemoración también sirvió para recordar hechos heroicos que marcaron la historia reciente del voluntariado en el Atlántico. El mayor Néstor Rodríguez, director seccional de la Defensa Civil, revivió la participación clave de los equipos del departamento durante la atención al huracán Iota, donde conformaron un contingente decisivo para atender a la población afectada.
Entre los asistentes destacó la presencia de Juan Fernando Guzmán Bernal, voluntario con 35 años de servicio, quien relató uno de los rescates más significativos de su trayectoria: el salvamento de un habitante en riesgo de perder su vida durante un deslizamiento de tierra en el sector de Los Toboganes. “Logramos sacarlo segundos antes de que su casa colapsara. Ese día entendí, una vez más, que nuestro deber es estar donde más nos necesitan”, recordó.
El Atlántico cerró la jornada reafirmando que el voluntariado no solo es una fuerza operativa, sino el mayor activo moral del Caribe, una red humana que mantiene viva la solidaridad y el compromiso social en cada rincón del territorio.


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