Bogotá fue escenario de un encuentro que reunió a más de 230 mujeres en condiciones de vulnerabilidad, quienes participaron en el Taller Integral de Sanación y Empoderamiento liderado por la Fundación Fe y Alegría. El evento se llevó a cabo en el Colegio Santa Luisa, en la localidad de Kennedy, y contó con la presencia de mujeres de distintas edades, incluyendo adultas mayores, niñas y mujeres trans.
El encuentro surgió en un contexto preocupante: según el Instituto Nacional de Salud, el 75,6 % de los casos reportados de violencia de género en Colombia corresponden a mujeres, y solo en Bogotá, las localidades de Kennedy, Ciudad Bolívar, Bosa y Suba concentran el 74 % de los feminicidios tipificados. Estas cifras reflejan la urgencia de crear espacios de sanación, acompañamiento y empoderamiento para transformar las realidades de las mujeres en la capital.
La jornada se centró en el cuidado del cuerpo como un territorio digno, la resignificación de historias personales y la visibilización de proyectos productivos. Se presentaron más de una docena de iniciativas en áreas como reciclaje, bisutería, tejido, panadería, velas y jardinería, muchas de ellas nacidas como respuesta a experiencias de vulnerabilidad. Estos proyectos fueron impulsados gracias a donaciones solidarias superiores a 15 millones de pesos, gestionadas por mujeres empresarias y aliadas del Círculo de Mujeres de Revista Semana y Dinero.
“La sororidad no es solo abrazarnos, es tejer redes para protegernos, cuidarnos y caminar juntas. Apostarle al empoderamiento de las mujeres es también apostar por la justicia social y otro mundo posible”, expresó la hermana Zoila Cueto, coordinadora regional de Iniciativas de Desarrollo y Empoderamiento de Fe y Alegría.
Las participantes llegaron desde al menos cinco localidades de Bogotá y el municipio de Soacha, generando un espacio intergeneracional y diverso que permitió compartir experiencias y fortalecer liderazgos. Estos espacios buscan no solo resignificar el papel de la mujer en sus comunidades, sino también abrir oportunidades de autonomía económica y liderazgo social.
Con este tipo de actividades, Fe y Alegría ratifica su compromiso con la educación popular y el fortalecimiento de procesos territoriales que dignifiquen la vida de las mujeres en situación de vulnerabilidad. La organización asegura que el empoderamiento femenino es clave para transformar estructuras sociales que perpetúan la injusticia y la desigualdad.
Fe y Alegría, con más de cinco décadas de trabajo en Colombia y presencia en 22 países, continúa siendo un referente en la promoción de la paz, la justicia social y el desarrollo humano integral, consolidando esperanza en comunidades que luchan por un futuro más justo y solidario.