Cali vive momentos de conmoción tras el atentado terrorista perpetrado este jueves 21 de agosto en inmediaciones de la Escuela de Aviación Marco Fidel Suárez, ubicada en el barrio La Base. La explosión, que habría sido ocasionada con un camión cargado de cilindros bomba, dejó un saldo preliminar de seis personas muertas y más de 50 heridas, entre ellas dos menores de 17 y 6 años de edad.

El alcalde de Cali, Alejandro Eder, rechazó enérgicamente el ataque y anunció una recompensa de hasta 400 millones de pesos para quien entregue información que permita dar con los responsables. Además, ordenó activar todas las capacidades de la Administración Distrital para atender a los heridos y reforzar las investigaciones.

“No nos vamos a doblegar ante los terroristas. He hablado con el comandante de la Policía Metropolitana de Cali para asegurar todas las entradas a la ciudad de manera inmediata. Vamos a restringir el tránsito de camiones de más de 4 toneladas desde las 7:00 p.m. hasta las 4:00 a.m. de mañana viernes”, aseguró Eder en rueda de prensa.

El Puesto de Mando Unificado (PMU), activado tras la emergencia, confirmó que los heridos fueron trasladados a por lo menos nueve centros asistenciales debido a la gravedad de las lesiones. La explosión también destruyó seis vehículos, además de causar daños materiales a viviendas y locales comerciales del sector.

La Defensa Civil, la Cruz Roja y el Cuerpo de Bomberos de Cali trabajan en la zona controlando la emergencia, mientras la Secretaría de Movilidad implementa desvíos para facilitar el tránsito de ambulancias y el traslado de los heridos. El sistema de transporte masivo MIO también reportó desvíos en la ruta P24B, que normalmente circula por la Carrera Octava.

Según las primeras versiones, el ataque inició cuando desde el camión fueron lanzados dos artefactos explosivos al interior de la base militar, que no generaron daños significativos dentro de la guarnición. Sin embargo, minutos después, el vehículo explotó en la parte externa, provocando una fuerte onda expansiva que se escuchó en gran parte de la zona nororiental de Cali.

Hasta el momento, ningún grupo armado ilegal se ha atribuido la autoría del atentado. No obstante, las autoridades confirmaron la captura de un hombre vestido con un overol azul oscuro, señalado de participar directamente en la ejecución del hecho.

La ciudad permanece en alerta máxima mientras avanzan las investigaciones judiciales para esclarecer lo ocurrido y determinar si detrás de este atentado estarían disidencias de grupos armados organizados que operan en el país.