Colombia sigue consolidando su liderazgo en el escenario internacional, no solo como exportador de café y flores, sino también como referente en la industria de las fajas, al ocupar el segundo lugar mundial en producción y exportación. Lo que en el pasado se asociaba con prendas rígidas y poco cómodas, hoy es sinónimo de bienestar, innovación tecnológica y versatilidad para la vida cotidiana.
Durante décadas, las fajas fueron concebidas como accesorios de uso ocasional, pensadas para procesos médicos o eventos específicos. Sin embargo, la evolución de la tecnología textil y el diseño ergonómico ha transformado esta percepción, integrando estas prendas en la vida diaria de miles de personas que hoy las consideran aliadas de salud, estilo y confianza.
Brenda Ramos, gerente de mercadeo de la marca colombiana Diane & Geordi, explicó que “estamos frente a una nueva generación de fajas que no limitan, sino que acompañan. Su objetivo es facilitar la vida, no complicarla”. Con más de tres décadas de trayectoria, la compañía ha liderado esta transformación que responde a las exigencias de un mercado global en expansión.
Entre los principales avances que redefinen la experiencia de uso se destacan cuatro ejes. Primero, el soporte lumbar y la compresión inteligente, que ayudan a mantener una postura saludable y previenen molestias musculares, incluso en trabajos prolongados. Segundo, la comodidad de tejidos transpirables y sin costuras, que convierten la prenda en una verdadera “segunda piel”. Tercero, el impacto en la confianza personal, ya que el moldeo suave y natural refuerza la autoestima sin recurrir a sacrificios estéticos. Y cuarto, la versatilidad de diseños como shorts, bodys o camisillas moldeadoras, que se adaptan a cualquier atuendo sin dejar rastro.
El mercado internacional de fajas crece con fuerza, impulsado por una tendencia hacia la moda funcional y el bienestar. En este contexto, Colombia se ha convertido en epicentro de innovación y calidad, proyectando que estas prendas dejen de ser un accesorio ocasional para convertirse en básicos imprescindibles, al mismo nivel que unos jeans o una camiseta blanca.
Diane & Geordi, con presencia en varios países y más de 200 puntos de venta internacionales, se ha posicionado como protagonista de esta revolución. La marca ha fusionado confección de alto nivel con investigación en materiales para ofrecer soluciones que combinan estilo, comodidad y salud.
La historia de las fajas ya no se narra desde la opresión o el sacrificio estético. El nuevo relato es el de la tecnología aplicada al bienestar y la confianza, con sello colombiano. Así, el país reafirma su capacidad de innovar y conquistar mercados, demostrando que la moda también puede ser un puente entre identidad, desarrollo económico y transformación cultural.