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Eduardo Verano alza la voz por la infancia en jornada nacional de reflexión: “Saquemos a los niños del conflicto armado”

Desde el Cubo de Cristal en la emblemática Plaza de la Paz en Barranquilla, el gobernador del Atlántico, Eduardo Verano, se sumó a la jornada nacional Velatón por la Paz, liderada por la Federación Nacional de Departamentos (FND), con un mensaje claro y contundente: proteger la vida, rechazar la violencia y, especialmente, sacar a los niños del conflicto armado. El llamado se produce tras el atentado contra el senador Miguel Uribe, perpetrado por un menor de 14 años instrumentalizado por grupos armados ilegales.

Vestido de blanco y acompañado por líderes religiosos, académicos y ciudadanos, el mandatario lideró un acto simbólico de unión nacional por la paz, la reconciliación y la defensa de la vida. “No podemos seguir utilizando a los niños como instrumentos de guerra. Es inmoral y condenable. Hoy más que nunca, Colombia debe proteger su infancia”, expresó Verano durante su intervención.

El gobernador recordó su paso como ministro del Medio Ambiente en los años noventa, cuando lideró el proceso Saquemos la naturaleza del conflicto, y ahora propone una nueva causa: Saquemos a los niños del conflicto. “La tragedia de lo ocurrido se agrava porque quien atentó contra la vida de un candidato presidencial es un menor. Es un reflejo brutal de la falta de oportunidades y del abandono social que enfrentan miles de jóvenes en nuestro país”, enfatizó.

El acto, que tuvo réplicas en plazas y parques de 19 departamentos del país, fue escenario también para un llamado colectivo a la unidad nacional, sin importar ideologías, credos o filiaciones políticas. “Quienes destruyen vías, peajes o estaciones de policía no atentan contra un gobierno, atentan contra todos. Es nuestra infraestructura, es nuestra inversión, es nuestro futuro”, sostuvo el gobernador al denunciar que la violencia solo deja miedo, retroceso y pérdida de oportunidades.

Líderes de la sociedad civil, como el arzobispo de Barranquilla, monseñor Pablo Salas; el pastor Roberto Morales, en representación de las iglesias cristianas; y Carlos Granadillo, de la Asociación de Instituciones de Educación Superior del Caribe (Asiesca), también intervinieron con mensajes centrados en el valor de la vida, el perdón y la urgencia de sanar como nación.

“Estamos aquí para agradecer por la vida, pedir perdón por haberla ofendido, y suplicar al Señor que sane las heridas que han dejado hechos tan dolorosos como el que hoy mantiene al senador Miguel Uribe luchando por su salud”, expresó monseñor Salas, en un mensaje que conmovió a los asistentes.

La Velatón por la Paz se replicó simultáneamente en distintos puntos del país, incluyendo Medellín, Tunja, Florencia, Montería, Quibdó, Popayán, Valledupar, Bogotá, Neiva y otras capitales departamentales, en una expresión colectiva del país que se niega a normalizar la violencia y que apuesta por la vida, la esperanza y la reconstrucción del tejido social.

Con esta jornada, la Gobernación del Atlántico reiteró su compromiso de seguir impulsando acciones concretas por la paz y la protección de la niñez, y llamó a todos los sectores a unirse con un objetivo común: devolverle a Colombia el derecho de vivir en armonía y con dignidad.