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Verano pide proteger Bellas Artes y rechaza actos que pongan en riesgo el patrimonio de los atlanticenses

El gobernador del Atlántico y presidente del Consejo Superior de la Universidad del Atlántico, Eduardo Verano, envió un mensaje firme a los estudiantes que protestan por la designación del nuevo rector en la sede de Bellas Artes, recordándoles que la infraestructura que hoy ocupan es un patrimonio recuperado con el esfuerzo de toda la ciudadanía y que debe respetarse.

Verano destacó que comprende el derecho a la manifestación, pero advirtió que ninguna inconformidad justifica daños a un espacio cultural cuya restauración tomó años y requirió una millonaria inversión pública. “Bellas Artes es una joya arquitectónica que rescatamos entre todos. Los impuestos de los atlanticenses financiaron su recuperación y hoy es motivo de orgullo nacional. No podemos permitir actos que deterioren un patrimonio que nos pertenece a todos”, expresó.

El mandatario recordó que la remodelación de Bellas Artes fue entregada oficialmente el 12 de agosto de este año, en un evento que reunió a autoridades nacionales, departamentales, docentes, estudiantes y representantes del sector cultural, y que significó el cierre de un proceso largo y complejo.

Una restauración que nació de la crisis

Los trabajos de recuperación comenzaron tras dos hechos críticos: el desplome del Aula Magna en 2017 y el colapso del Teatro Pedro Biava en 2018. Estos incidentes evidenciaron el deterioro profundo del complejo y obligaron a activar la Mesa Pro-Bellas Artes, integrada por estudiantes, docentes, directivos y la Gobernación, con el fin de impulsar una intervención integral bajo los lineamientos del Ministerio de Cultura, dado que se trata de un bien de interés cultural de carácter nacional.

El proyecto, que arrancó formalmente el 26 de abril de 2022 y concluyó el 21 de junio de 2025, incluyó la recuperación total de seis bloques: el Aula Magna, el Teatro Pedro Biava, el Museo Arqueológico, la Galería Alejandro Obregón, la Decanatura y las aulas de artes plásticas, danza y teatro. Además, se restauraron los jardines internos y se renovaron las zonas de acceso.

Entre las obras realizadas se destacan el reforzamiento estructural, la recuperación artesanal de cubiertas republicanas en madera y teja, la modernización de sistemas de climatización y la instalación de rampas para garantizar la accesibilidad universal. En total fueron intervenidos 7.174 metros cuadrados, junto con 1.103 metros cuadrados de urbanismo.

La inversión ascendió a $40.972 millones, financiados en un 78 % por la Gobernación del Atlántico mediante la Estampilla Prociudadela Universitaria; un 18 % por la Universidad del Atlántico; y un 3 % por el Ministerio de Educación Nacional.

“No hay espacio para el vandalismo”

Verano insistió en que ningún desacuerdo administrativo justifica afectar un bien cultural protegido. “Este patrimonio no puede convertirse en escenario de arbitrariedades. La protesta es legítima, pero atentar contra una edificación restaurada con el esfuerzo de generaciones es inaceptable”, concluyó.

El llamado del gobernador busca evitar daños irreparables en una de las instituciones culturales más emblemáticas del departamento, cuyo renacer costó años de gestión, trabajo técnico y compromiso ciudadano.