Cada año miles de colombianos viajan a Estados Unidos con la ilusión de conocer sus principales destinos turísticos, visitar familiares o disfrutar de unas vacaciones inolvidables. Sin embargo, las autoridades migratorias estadounidenses han reforzado los controles de ingreso y permanencia, especialmente ante el aumento de casos de viajeros que exceden los límites de su visa o realizan actividades no permitidas.
La visa de turismo B1/B2 permite ingresar legalmente a Estados Unidos para fines recreativos, visitas familiares, tratamientos médicos o participación en eventos específicos como conferencias o ferias. No obstante, quienes viajan bajo esta categoría deben ser cuidadosos con el tipo de actividades que realizan durante su estadía, ya que cualquier incumplimiento podría acarrear la cancelación inmediata del visado o incluso la deportación.
Entre las actividades permitidas con esta visa se incluye viajar por turismo, asistir a congresos o ferias comerciales, visitar a familiares o amigos y recibir atención médica, siempre que el visitante pueda demostrar que cuenta con los recursos necesarios para cubrir los gastos del tratamiento. También se pueden realizar cursos cortos sin carácter académico, como clases de arte, idiomas o fotografía, que no representen una fuente de ingresos.
En cambio, hay tres actividades que están totalmente prohibidas bajo esta categoría:
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Trabajar o recibir compensaciones económicas: el titular de una visa de turista no puede desempeñar ningún empleo, ya sea formal o informal, ni recibir pagos por servicios dentro del país. Para ello se requiere una visa de trabajo o residencia temporal autorizada.
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Estudiar programas académicos prolongados: no está permitido cursar carreras universitarias o programas de formación de larga duración. Quienes deseen hacerlo deben tramitar una visa de estudiante (F1 o M1).
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Residir permanentemente o extender su estancia más allá del tiempo autorizado: la visa de turismo no otorga derecho de residencia. Al ingresar, un oficial de Aduanas y Protección Fronteriza determina la duración de la estadía, que usualmente no supera los seis meses. Superar ese plazo o intentar permanecer de forma indefinida puede implicar sanciones y futuras restricciones de ingreso.
Las autoridades estadounidenses recordaron que cada caso es evaluado individualmente en los puntos de entrada. Si un oficial sospecha que la intención del viajero no corresponde al propósito declarado, puede negar el acceso o revocar el visado.
Por ello, se recomienda a los colombianos informarse bien antes de viajar y evitar cualquier actividad que ponga en riesgo su estatus migratorio. Cumplir con las normas garantiza no solo una experiencia tranquila, sino también la posibilidad de volver a visitar Estados Unidos en el futuro sin inconvenientes.