La Procuraduría abrió un proceso indagatorio por la polémica ‘jugadita’ a la que hizo alusión el saliente presidente del senado Ernesto Macías. Se evaluará si el senador del Centro Democrático incurrió en alguna falta disciplinaria que deba ser sancionada.
El proceso de indagatoria tendrá una visita al Senado por parte de la Procuraduría, quienes recolectarán información para determinar si el intento de sabotaje a la oposición fue perjudicial. Todo esto luego de que Macías sin darse cuenta que los micrófonos estaban abiertos expresara lo siguiente “Entonces qué hermano, es que le voy a hacer una jugada a esos de la oposición, es que nos toca como obligación que ellos hablen después del presidente (Iván Duque) y entonces, tan pronto termine él, yo digo ‘se decreta un receso’ y le pido a la comisión que acompañen al presidente, y lo saco de aquí. Eso no lo saben, es mi última jugadita de presidente”.
Aunque se tiene el audio como prueba, es posible que el caso no genere ningún tipo de sanción disciplinaria. Porque el sabotaje previsto para que la oposición no hablara no se llevo a cabo, y el senador Robledo si intervino según el estatuto que les garantiza el acceso a medios de comunicación por espacio de 20 minutos. Cabe aclarar que aunque se hizo la intervención de la oposición no fue un espacio donde se respetara al senador, quien tuvo que pedir en más de una ocasión silencio y respeto a los congresistas.
Así se pronunció Macías sobre el hecho desafortunado para él.
Respuesta para algunos de mis críticos: cometí un error, pero nunca he cometido delitos.
— Ernesto Macías Tovar (@ernestomaciast) July 21, 2019
