El precandidato presidencial Mauricio Lizcano criticó la posición de la Procuraduría General de la Nación frente a la solicitud presentada ante la Sección Quinta del Consejo de Estado para anular la personería jurídica de su partido, Gente en Movimiento. La controversia surge porque, según Lizcano, el organismo disciplinario no reconoció el secuestro de su padre, el excongresista Óscar Tulio Lizcano, como un hecho de violencia dentro del proceso.
“Extraño que el secuestro de mi padre, cuando era representante a la Cámara, no fuera registrado como hecho de violencia por parte de la Procuraduría. Entonces, ¿qué es violencia?”, manifestó el precandidato a través de su cuenta en la red social X.
El episodio al que se refiere ocurrió en el año 2000, cuando las FARC secuestraron a Óscar Tulio Lizcano en medio de sus labores políticas en el Quindío. El excongresista permaneció más de ocho años en cautiverio, en condiciones infrahumanas, hasta que logró escapar en 2008. Este hecho marcó profundamente a su familia y motivó a Mauricio Lizcano a emprender un camino político enfocado en la defensa de la libertad y la lucha contra la violencia.
Gente en Movimiento nació como una propuesta política para transformar el dolor en propósito, con la meta de rechazar cualquier forma de violencia y construir un país en el que ningún colombiano vuelva a vivir un hecho similar. El pronunciamiento de Lizcano busca llamar la atención sobre lo que considera una omisión grave en la valoración de la historia de su partido.