Esta semana la Corte Constitucional define el futuro de la Ley de Financiamiento que fue aprobada el 28 de diciembre y que entró en vigencia el primero de enero de este año.

En medio de la incertidumbre los parlamentarios encuentran opiniones divididas frente a los riesgos que podría tener su posible caída.

Nicolás Araujo, Senador de la República por el Centro Democrático, aseguró que su caída generaría una gran incertidumbre jurídica en el país.

“No solamente quedaría en entredicho la financiación de algunas fuentes nuevas,sino que, lo más peligroso, serían los incentivos que crea la ley y que serían un alivio para las empresas pequeñas y grandes(…) hacer una reversa en estos estímulos es sumamente grave para la reactivación económica que todos estamos esperando”

Por su parte el Senador Guillermo García Realpe del Partido Liberal aseguró que su caída le generaría más beneficios al país.

La Representante del Partido Verde, Katherine Miranda, afirmó que si llegase a caer, el Gobierno tiene que hacer una reforma estructural

“No nos podemos conformar con pañitos de agua tibia, y el gobierno debe pensar si le va a mantener las excepciones tan enormes de más de 9 billones a las empresas o si empieza a generar una reforma tributaria que a quienes ganen más paguen más y quienes tienen menos aporten menos, cosa que no está pasando”

Por último, Richard Aguilar del Partido Cambio Radical aseguró que espera que la Corte tome una decisión moderada en miras al bienestar del país.

“Si se cae la ley nos vamos perder la oportunidad para que las empresas tengan una menor carga tributaria y que ocho mil beneficiarios del régimen simple quedarían en un limbo jurídico. Esperamos que la decisión sea responsable y por supuesto que no genere efectos catastróficos para el próximo año”.

Esta semana será clave en la decisión que tome la Corte Constitucional, si declara exequible o si cae la Ley de Financiamiento.