Voceros comunitarios del sur del Atlántico encendieron las alarmas por nuevas filtraciones en el Canal del Dique, una problemática que amenaza con provocar inundaciones en sectores vulnerables de municipios como Repelón, Campo de la Cruz y Santa Lucía. Ante el riesgo, los líderes solicitan con urgencia al Gobierno Nacional acelerar los trámites pendientes para reanudar el megaproyecto de restauración de los ecosistemas degradados del canal.
Antuaneth Ospino, gestora comunitaria de la región, explicó que las filtraciones son un fenómeno recurrente que se agudiza durante la temporada invernal y con la crecida de los niveles del canal. “Desde el kilómetro cero en Calamar hasta Las Compuerticas en Repelón, las filtraciones han existido históricamente. Mitigamos con lo que podemos, pero esto no es suficiente. Se necesita ejecutar obras estructurales y definitivas”, afirmó.
Ospino también alertó que el nivel del canal sigue aumentando día tras día, lo que eleva el riesgo para los pobladores de la zona ribereña. Según ella, si no se toman medidas preventivas inmediatas, podría repetirse una tragedia similar a la ocurrida en años anteriores durante el paso de fenómenos como La Niña.
Preocupación por puntos críticos aún sin intervención
William Lastra, otro de los voceros comunitarios, se refirió a la paralización del megaproyecto adjudicado a la firma SACIR. “Existen trámites ambientales sin resolver con el Ministerio de Ambiente. Lo más grave es que, a pesar de los recorridos conjuntos con la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres y la Gobernación del Atlántico, los puntos críticos identificados siguen sin intervención”, advirtió.
El proyecto, conocido como “Restauración de los ecosistemas degradados del Canal del Dique”, ha estado suspendido por más de un año y medio, a la espera de licencias y autorizaciones ambientales que no han sido resueltas. La obra es considerada clave para contener inundaciones, mejorar la navegabilidad y restablecer el equilibrio ecológico de la zona.
Llamado al Gobierno Nacional
Los líderes comunitarios hicieron un llamado directo al Gobierno Nacional para que destrabe los procesos administrativos y permita la pronta reanudación de los trabajos. “No podemos esperar a que una emergencia nos obligue a actuar. Las comunidades del sur del Atlántico merecen seguridad, infraestructura resiliente y protección frente a los embates de la naturaleza”, concluyó Lastra.
Mientras tanto, los habitantes de la región continúan implementando acciones de mitigación por su cuenta, mientras enfrentan un panorama incierto marcado por el aumento de los niveles del agua y la amenaza de nuevas emergencias.