Un nuevo atentado contra la infraestructura petrolera del país se registró en la zona rural del municipio de Saravena, departamento de Arauca. Esta vez el blanco fue el Oleoducto Bicentenario, cuyo ataque provocó un derrame de crudo en el caño Caranal, afectando de forma directa el entorno natural y generando alerta entre las comunidades cercanas.
Ecopetrol informó que, ante la emergencia ambiental, se activó de inmediato el plan de contingencia con el fin de contener y mitigar el impacto del derrame. Las labores se realizan en coordinación con autoridades ambientales, cuerpos de socorro y líderes comunitarios de la zona.
“Desde el momento en que se conoció la situación, nuestros equipos técnicos y operativos fueron desplegados para adelantar las acciones de contención y limpieza, bajo los más altos estándares ambientales y de seguridad”, indicó la empresa en un comunicado.
El atentado se suma a una serie de hechos violentos que han venido afectando la infraestructura energética en regiones estratégicas del país. Ecopetrol condenó el hecho y reiteró que este tipo de acciones no solo afectan la economía y la seguridad energética nacional, sino que representan un grave riesgo para las comunidades y los ecosistemas.
El caño Caranal, afluente de relevancia ecológica para la región del Piedemonte araucano, ha sido impactado directamente por la fuga de petróleo. Las autoridades ambientales del departamento evalúan el grado de afectación a la fauna, la flora y las fuentes de agua.
La comunidad local ha solicitado mayor presencia institucional y medidas de protección frente a los continuos actos de violencia que, además de generar riesgos ambientales, comprometen la tranquilidad y el bienestar de los habitantes.
Mientras avanzan las investigaciones para establecer a los responsables del atentado, las labores de recuperación ambiental se mantendrán durante los próximos días en la zona afectada.