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Atlántico refuerza el llamado a celebrar sin pólvora ante aumento de adultos quemados por consumo de alcohol

La Gobernación del Atlántico intensificó su estrategia de prevención durante la temporada decembrina luego de evidenciar un preocupante aumento de adultos lesionados por pólvora, muchos de ellos bajo los efectos del alcohol, pese a una reducción significativa en los casos que involucran a menores de edad.

De acuerdo con el más reciente balance de la Secretaría de Salud del Atlántico, con corte al 21 de diciembre, se reportaron 36 personas lesionadas por artefactos pirotécnicos en el departamento. De ese total, nueve corresponden a niños, niñas y adolescentes, lo que representa una disminución del 56 por ciento frente al mismo periodo del año anterior. Sin embargo, los casos en adultos pasaron de 17 en 2024 a 27 en 2025, un incremento del 37 por ciento que encendió las alertas de las autoridades sanitarias.

La secretaria de Salud encargada, Rosmery Wehedeking, valoró la reducción en los casos infantiles, pero advirtió que el riesgo persiste y que los adultos siguen siendo el principal factor de peligro. Señaló que, aunque las lesiones en menores no han sido graves, afectan su bienestar y son consecuencia directa de la irresponsabilidad de quienes permiten o manipulan pólvora en su entorno.

El informe del Sistema de Vigilancia en Salud Pública revela además que 18 de los adultos lesionados se encontraban en estado de embriaguez al momento del accidente, lo que confirma la relación entre el consumo de alcohol y el uso imprudente de pólvora. Los días 7 y 8 de diciembre concentraron el mayor número de casos, seguidos por nuevos reportes durante el inicio de las novenas.

Ante este panorama, la Gobernación del Atlántico mantiene activa la vigilancia intensificada por lesiones con pólvora desde el 1 de diciembre hasta el 17 de enero de 2026, en coordinación con el Instituto Nacional de Salud, la red hospitalaria y el Centro Regulador de Urgencias y Emergencias. De igual forma, continúa vigente la alerta amarilla hospitalaria para garantizar la atención oportuna ante cualquier emergencia.

Las autoridades reiteraron que cualquier tipo de pólvora representa un riesgo para la vida y la integridad física, por lo que insistieron en la denuncia inmediata de su venta a menores o del uso irresponsable en los municipios. Las secretarías de Salud locales y las instituciones prestadoras de servicios mantienen activos sus planes de contingencia con personal, insumos y ambulancias disponibles.

Como parte de la respuesta preventiva, la Gobernación avanza en los 22 municipios del departamento con la campaña Cero pólvora cero drama, una estrategia que busca transformar la cultura festiva y romper la normalización del riesgo. La gerente de Capital Social, Karina Llanos, explicó que el enfoque apunta a generar conciencia en los hogares y en los adultos, mostrando historias reales de personas que cargan cicatrices de por vida por accidentes evitables.

La iniciativa promueve la corresponsabilidad familiar y comunitaria, resalta la protección de la niñez y llama a celebrar desde la alegría, la convivencia y el respeto por los animales y el entorno. El mensaje central es claro: en el Atlántico se puede vivir la Navidad y el fin de año sin pólvora, sin tragedias y sin dejar marcas irreversibles en la vida de las personas.