PUBLICIDAD

Washington estudia nuevas acciones en Venezuela mientras crece la tensión regional

Un nuevo capítulo podría abrirse en la ya compleja relación entre Estados Unidos y Venezuela. Según información revelada por la agencia Reuters, altos funcionarios estadounidenses confirmaron que la Casa Blanca evalúa iniciar en los próximos días una nueva fase de operaciones relacionadas con el país sudamericano, en un escenario que aumenta la incertidumbre política y militar en la región.

Las fuentes, cuatro en total, señalaron que aún no existe claridad sobre el alcance ni el momento exacto en el que se pondrían en marcha dichas acciones. Tampoco se ha establecido si el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, tomó ya una decisión definitiva.

Aun así, uno de los funcionarios citados fue enfático al señalar la postura del mandatario: “El presidente Trump está dispuesto a utilizar todos los recursos del poder estadounidense para impedir que las drogas sigan llegando a nuestro país y llevar a los responsables ante la justicia”.

Un abanico de opciones sobre la mesa

Reuters también reveló que dos funcionarios aseguraron que dentro de las alternativas analizadas aparece una que genera especial preocupación: la posibilidad de intentar derrocar al presidente venezolano Nicolás Maduro, quien permanece en el poder desde 2013.

Maduro ha insistido en que Estados Unidos busca removerlo para apropiarse de los recursos naturales de Venezuela, principalmente petróleo y minerales estratégicos. Desde Washington, en cambio, se ha mantenido el discurso de que cualquier acción estaría asociada a la lucha contra el narcotráfico y a la “restauración del orden democrático”.

Otro punto clave confirmado por las fuentes es que en las últimas semanas han existido conversaciones directas entre Caracas y Washington, lo que evidencia contactos diplomáticos paralelos mientras aumentan los rumores sobre posibles operaciones.

Trump anuncia que hablará con Maduro

En una entrevista concedida a Fox News, recientemente publicada, Donald Trump confirmó que sostendrá un diálogo con el mandatario venezolano. Aunque no ofreció detalles, dejó entrever que el anuncio será determinante.

“Hablaré con él en un futuro no muy lejano. No puedo decir qué, pero tengo algo muy específico que decir”, aseguró el presidente estadounidense.

Este mensaje, sumado a los reportes de Reuters, alimenta la expectativa internacional sobre un posible giro en la política exterior de Estados Unidos hacia Venezuela.

Mientras tanto, el gobierno de Maduro mantiene su narrativa de resistencia frente a las presiones externas y acusa a Washington de promover desestabilización para justificar una intervención.

El panorama, por ahora, queda marcado por la incertidumbre, las tensiones diplomáticas y un clima geopolítico que podría transformarse en cuestión de días.