Un borrador de decreto que circula en el Gobierno Nacional encendió el debate diplomático en el país: la propuesta plantea desmontar los requisitos de formación académica y experiencia profesional para ocupar los cargos de embajador extraordinario y cónsul de Colombia, permitiendo que cualquier ciudadano colombiano por nacimiento, mayor de 25 años, pueda ser designado en estas posiciones.
El documento preliminar señala que ya no sería obligatorio acreditar estudios universitarios, especializaciones en relaciones internacionales o experiencia en el servicio exterior, elementos que históricamente han sido considerados indispensables para asumir funciones de representación del Estado en el exterior.
Según el texto, “bastará con ser nacional colombiano por nacimiento, en ejercicio de su ciudadanía, y tener más de veinticinco (25) años”, una modificación que, de aprobarse, transformaría significativamente los criterios de selección para los altos cargos diplomáticos.
La propuesta abre la puerta a que el Gobierno tenga mayor discrecionalidad al momento de elegir a sus representantes en embajadas y consulados, distanciándose del modelo técnico promovido en distintas reformas del servicio exterior durante las últimas décadas.
Aunque el decreto aún no ha sido expedido oficialmente, sectores políticos y expertos en diplomacia ya cuestionan la iniciativa, señalando que podría afectar la profesionalización de la carrera diplomática y el manejo de las relaciones internacionales del país. Otros, por el contrario, consideran que permitiría mayor participación ciudadana en estos roles.
El Gobierno no ha entregado declaraciones adicionales sobre la fecha de publicación ni los alcances definitivos del decreto, pero se espera que la discusión continúe en los próximos días dentro del Congreso y la opinión pública.


ESCÚCHANOS EN LAVIBRANTE RADIO 📻






