El presidente Gustavo Petro anunció una nueva convocatoria ciudadana para promover la recolección de firmas con el fin de abrir paso a una Asamblea Constituyente, en medio de un ambiente político marcado por la absolución del expresidente Álvaro Uribe Vélez y las crecientes tensiones diplomáticas entre Colombia y Estados Unidos.
A través de su cuenta en la red social X, el mandatario invitó a sus seguidores a reunirse el próximo viernes 24 de octubre en la Plaza de Bolívar de Bogotá, donde se dará inicio al proceso de recolección de firmas. “Ha llegado la hora de las definiciones y quien define no es Trump, es el pueblo. Los espero en la Plaza de Bolívar este viernes para comenzar la recolección de las firmas del poder constituyente”, escribió el jefe de Estado.
La convocatoria se da luego de que la Sala Penal del Tribunal Superior de Bogotá revocara la condena impuesta en primera instancia contra el expresidente Uribe por los delitos de soborno y fraude procesal. La decisión judicial, que lo declaró inocente, generó múltiples reacciones políticas y sociales.
Petro, en respuesta al fallo, manifestó su preocupación por lo que considera un intento de desestabilización en su contra. “En la Comisión de Acusaciones ya buscan, los que están metidos en el desfalco del Fomag, el golpe de Estado”, afirmó, sugiriendo que existen sectores interesados en frenar su gobierno mediante mecanismos institucionales o políticos.
El anuncio presidencial también incluyó críticas directas al presidente estadounidense Donald Trump, a quien señaló de respaldar a dirigentes políticos colombianos vinculados al expresidente Uribe. “Trump, aliado con estos políticos y con Uribe, buscará la sanción al presidente que denunció las alianzas entre el poder político colombiano y el narcotráfico paramilitar”, expresó Petro.
No es la primera vez que el mandatario propone la idea de una Asamblea Constituyente. En distintas intervenciones, ha planteado que Colombia necesita un nuevo pacto social que permita transformar el modelo político y económico vigente. Sin embargo, su propuesta ha generado resistencias en amplios sectores de la oposición y en el empresariado, que la consideran una amenaza para la estabilidad institucional del país.
La reactivación del debate sobre una Constituyente se suma a un contexto de fuerte tensión diplomática entre Bogotá y Washington, tras los recientes cruces de declaraciones entre Petro y Trump, en los que el mandatario estadounidense llegó a calificar al presidente colombiano como “líder del narcotráfico”.
Mientras tanto, desde distintos sectores políticos se ha hecho un llamado a la prudencia y al respeto por las instituciones. Analistas consideran que la nueva convocatoria podría marcar un punto de inflexión en el discurso del gobierno, en medio de un escenario nacional polarizado y con la opinión pública dividida entre el respaldo al presidente y las preocupaciones por la estabilidad democrática.
Con este nuevo anuncio, el presidente Petro vuelve a poner sobre la mesa la idea de una transformación estructural del Estado, apelando a la movilización popular como instrumento para fortalecer lo que denomina “el poder constituyente del pueblo colombiano”.