El exfiscal general de la Nación, Francisco Barbosa, anunció su retiro de la carrera presidencial argumentando la falta de garantías de seguridad para él y su familia. La decisión, según explicó, fue tomada tras el asesinato del candidato Miguel Uribe Turbay y luego de evaluar el nivel de riesgo que enfrenta debido a amenazas recibidas durante y después de su gestión al frente de la Fiscalía.
Barbosa afirmó que su seguridad como exfiscal fue reducida de manera preocupante, lo que dificultaba sus desplazamientos en diferentes zonas del país. “Yo estaba incluso solo en los aeropuertos, solo en los aviones, solo en las llegadas. La situación era muy complicada”, expresó. Agregó que en su periodo como fiscal fueron capturadas más de 35.000 personas pertenecientes a organizaciones criminales y que ha recibido múltiples amenazas, además de presiones políticas y mensajes intimidantes.
El exfiscal explicó que la falta de respuesta institucional ante sus denuncias y las advertencias recibidas desde Estados Unidos sobre posibles riesgos a su integridad terminaron por convencerlo de que no podía continuar con su campaña. “No voy más. No tengo garantías”, manifestó Barbosa, asegurando que no existía entidad alguna a la cual acudir para reforzar su esquema de protección.
En cuanto al panorama político, Barbosa fue enfático en señalar que Colombia atraviesa una crisis democrática. “En Colombia no hay democracia verdadera. La democracia colombiana es una democracia fracturada”, sostuvo, al tiempo que denunció el uso de grandes sumas de dinero en la actual contienda, lo que calificó como una muestra de una “democracia mafiosa”.
El exfiscal también lamentó la violencia que ha marcado el inicio de la carrera electoral y criticó la falta de unidad entre los sectores de centro y derecha, instándolos a llegar a acuerdos que les permitan tener opciones reales en una eventual segunda vuelta presidencial.
Frente a las acusaciones del exdiputado Nicolás Petro, Barbosa negó cualquier negociación o intervención indebida dentro de la Fiscalía. “Lo que se afirma sin pruebas, se desestima sin pruebas”, respondió, asegurando que su gestión se caracterizó por la independencia y por rechazar beneficios judiciales a cambio de favores políticos.
Finalmente, Barbosa descartó unirse por ahora a alguna campaña y afirmó que su participación en la vida pública continuará desde el ámbito académico y de opinión. “Yo soy abogado, analista, profesor universitario, escritor. Seguiré opinando y diciendo lo que considero”, dijo, reiterando que la justicia debe estar por encima de la política y que Colombia necesita unidad para superar los desafíos institucionales y electorales que enfrenta.