Estados Unidos implementará a partir de 2025 un conjunto de nuevas medidas en sus aeropuertos con el fin de optimizar la experiencia de los viajeros, adaptarse al aumento del tráfico aéreo y fortalecer los sistemas de seguridad sin afectar la comodidad. La Administración de Seguridad en el Transporte (TSA), en conjunto con el Departamento de Seguridad Nacional, lidera esta transformación que marcará un antes y un después para los vuelos domésticos e internacionales hacia y desde el país norteamericano.
Uno de los cambios más relevantes es la eliminación del requisito de quitarse los zapatos durante los controles de seguridad, medida que estuvo vigente por más de una década. Esta decisión responde al avance en las tecnologías de escaneo y detección que ahora permiten verificar posibles amenazas sin la necesidad de este protocolo, lo que agiliza el proceso y reduce las filas en los puntos de control.
A su vez, se lanzó el programa “Families on the Fly”, que permitirá a las familias con niños acceder a carriles especiales en terminales autorizadas, facilitando su tránsito en épocas de alta demanda como vacaciones o días festivos. También se suma la iniciativa piloto “One Stop Security”, que elimina la doble revisión de maletas en vuelos de conexión dentro de Estados Unidos. Los pasajeros que cumplan con ciertos requisitos aduaneros ya no deberán recoger ni registrar nuevamente su equipaje, que pasará directamente al siguiente vuelo.
Otra innovación que ya comenzó a probarse en los principales aeropuertos del país es el uso de tecnología biométrica como el reconocimiento facial y el escaneo de huellas dactilares para validar la identidad de los pasajeros. Con esto, se busca reducir el uso de documentos físicos y facilitar el ingreso más ágil a las ciudades.
En cuanto a las restricciones de líquidos, la TSA evalúa modificar la regla que limita a 100 mililitros los envases en el equipaje de mano. Aunque la medida no está confirmada, se analiza flexibilizarla gracias a los avances tecnológicos que permitirían detectar sustancias riesgosas sin aplicar esta restricción estricta. De ser aprobada, su aplicación se anunciaría con anticipación y de forma progresiva en todos los aeropuertos del país.
Estos ajustes también impactarán a quienes utilizan programas como TSA PreCheck, Global Entry y Clear, y representan una apuesta por un sistema de seguridad más moderno, eficiente y adaptado a las nuevas necesidades de los pasajeros.
Si tiene previsto viajar a Estados Unidos en 2025, es clave informarse sobre estos cambios para evitar contratiempos y aprovechar los beneficios de esta nueva era aeroportuaria que busca combinar control, tecnología y comodidad.