La negociación entre el gremio arrocero y el Gobierno Nacional volvió a estancarse luego de que los representantes de los productores decidieran levantarse de la mesa por considerar que no existían condiciones para avanzar en un acuerdo que permita solucionar la crisis del sector. El encuentro, que tuvo lugar este jueves 17 de julio, se vio empañado por la ausencia de los ministros clave y la falta de compromisos concretos.
Óscar Gutiérrez, director de Dignidad Agropecuaria de Colombia, denunció que, en los últimos tres meses, han sostenido 28 reuniones con funcionarios del Ministerio de Agricultura —incluida una con la ministra Martha Carvajalino— sin que se haya adoptado medida alguna para atender las dificultades que enfrenta la producción arrocera del país.
“Les explicamos una y otra vez cuáles eran los problemas y qué se debía hacer, pero nunca hicieron nada. Esa inacción nos llevó al paro”, afirmó Gutiérrez en entrevista con Caracol Radio.
El paro nacional, que ya afecta las vías de ocho departamentos —Tolima, Huila, Córdoba, Meta, Casanare, Arauca, Sucre y Cesar— se originó por la falta de rentabilidad en la producción de arroz, el incremento en los costos de producción y el impacto de las importaciones. Según el gremio, por cada hectárea cosechada se pierden hasta 2,8 millones de pesos, lo que está llevando a la quiebra a pequeños y medianos productores.
Uno de los principales puntos de ruptura fue la exigencia de la ministra Carvajalino de que se levanten los bloqueos como condición para continuar el diálogo. Frente a esto, Gutiérrez respondió con contundencia: “No podemos seguir dialogando si no hay una voluntad real del Gobierno de sentarse y negociar con seriedad. No es tiempo de patear el balón”.
El líder gremial también rechazó que la reunión estuviera integrada únicamente por viceministros y técnicos, sin la presencia de los jefes de las carteras de Agricultura y Comercio, lo que según él, demuestra el poco interés del Gobierno en resolver una crisis que afecta la seguridad alimentaria del país.
“No se trata de bloqueos totales. Hay corredores humanitarios y se facilita el paso. Pero el Gobierno debe comprometerse con una mesa de negociación formal, seria y con capacidad de tomar decisiones”, agregó Gutiérrez.
Desde el gremio de los arroceros reiteran que la desconfianza con el Ejecutivo también se debe al incumplimiento de acuerdos en paros anteriores. Por ahora, el paro continúa y la producción sigue en riesgo, a la espera de que el Gobierno Nacional muestre una disposición real para salvar al sector arrocero colombiano.