En una jornada cargada de simbolismo, arte y profundo reconocimiento, la Fundación Monómeros lideró un emotivo homenaje que marcó un hito para la compañía y la ciudad: la declaratoria oficial del 27 de junio como el Día de la Resiliencia y la Esperanza. Esta iniciativa busca rendir tributo a la fuerza colectiva de los trabajadores, las comunidades aliadas y todos aquellos que, durante más de cinco décadas, han sido pilares de la transformación industrial y social de Barranquilla.
El evento tuvo lugar en las instalaciones de la empresa, donde se vivió un conmovedor concierto del ensamble “Música para la Paz”, integrado por más de 200 niños, niñas y adolescentes del barrio Las Flores. A través de sus voces e instrumentos, interpretaron ritmos tradicionales colombianos, llevando un mensaje de transformación y esperanza que tocó el alma de los asistentes. La presentación fue el reflejo del trabajo social que la Fundación Monómeros ha impulsado en las comunidades vulnerables.
“Este ensamble es mucho más que una muestra artística; es la voz de cientos de niños que le cantan a la paz, a la vida y a la dignidad. Durante más de dos años han venido construyendo esta puesta en escena que hoy nos emociona y nos une como organización”, expresó David Beltrán, director de la Fundación Monómeros, al dar inicio al acto.
El momento más solemne de la jornada fue la declaración oficial del 27 de junio como Día de la Resiliencia y la Esperanza, a cargo del gerente general Iván Sánchez, quien firmó un decreto institucional que consagra esta fecha como símbolo de la fortaleza y el compromiso de Monómeros con el desarrollo de Colombia. “Este es un homenaje al coraje de nuestros trabajadores, a su compromiso inquebrantable y a la historia de una empresa que ha sabido levantarse aún en los momentos más difíciles”, afirmó el directivo.
Acompañados por testigos honoríficos de distintos sectores —entre ellos, representantes del sector educativo, empresarial, gremial, cultural y comunitario— se develó una placa conmemorativa que quedará instalada de forma permanente en la sede de la compañía como recordatorio de esta nueva tradición.
Durante el evento también se destacó el legado de Monómeros como empresa emblemática del Caribe colombiano, clave en el desarrollo urbano, industrial y social de Barranquilla. Se recordaron los grandes hitos como la creación de Triple A y el impulso a la formación de profesionales que hoy lideran diferentes sectores del país.
La jornada culminó con una presentación del grupo “Colectivo Aduana”, que interpretó la canción “Fuerza y Vida”, escrita por el propio gerente Iván Sánchez y dedicada al campo colombiano. La pieza fue producida con el talento de destacados músicos de la región y cerró con un mensaje de unión y esperanza.
El acto fue transmitido en vivo a través de las redes sociales oficiales de Monómeros, permitiendo que cientos de personas se sumaran virtualmente a esta celebración. Con este paso, la compañía reafirma su compromiso con la memoria colectiva, la cultura empresarial y la construcción de un futuro sostenible basado en los valores que la han hecho resiliente por más de 57 años.