La situación del sistema de salud en Colombia continúa deteriorándose, mientras miles de ciudadanos enfrentan dificultades para acceder a medicamentos esenciales y servicios hospitalarios. Aunque el Gobierno asegura que los recursos están garantizados, los problemas financieros y de gestión persisten, afectando directamente a millones de usuarios.
Crisis de medicamentos y hospitales al borde del colapso
Cada día que pasa la crisis de medicamentos se extiende más y las deudas acumuladas con los gestores farmacéuticos ya superan los 4,4 billones de pesos, lo que ha provocado intermitencias en el abastecimiento de medicinas. La cifra ha aumentado drásticamente en los últimos años, pasando de 1,9 billones en 2022 a 2,9 billones en 2023. Esta deuda ha llevado a miles de personas a hacer largas filas en las droguerías, enfrentándose a la incertidumbre de si lograrán acceder a sus tratamientos.
El impacto de este trance no solo se limita a la falta de medicamentos. Diversos hospitales y clínicas han dejado de prestar servicios a afiliados de ciertas EPS, mientras otras instituciones han cerrado por completo debido a los altos costos operativos. Esto ha generado protestas de pacientes que exigen el respeto a su derecho a la salud.
Así mismo, expertos en salud pública coinciden en que la situación no es nueva, pero advierten que la gravedad actual es preocupante debido a la falta de medidas efectivas por parte del Gobierno. Jonatthan García Ruiz, investigador de la Universidad de los Andes, señala que el sistema está atravesando una contracción sin precedentes, lo que desalienta la inversión en el sector y pone en riesgo la continuidad de los servicios.
En contraste, el gobierno del presidente Gustavo Petro sostiene que el problema radica en la gestión inadecuada de las EPS, más que en la falta de recursos. Petro ha enfatizado que su administración ha realizado los mayores aumentos históricos a la Unidad de Pago por Capitación (UPC) y que el verdadero problema es la mala administración de las entidades promotoras de salud.
Soluciones en debate
Mientras los expertos piden un aumento en la inversión y una mejor distribución de los recursos, el Gobierno mantiene su postura de impulsar una reforma que transforme a las EPS en gestoras de salud y vida, enfocándose en una administración directa por parte del Estado. Sin embargo, las voces críticas argumentan que esta medida podría agravar el deterioro del sistema en lugar de solucionarlo.
Por otro lado, la Corte Constitucional ha ordenado establecer mesas de diálogo para revisar la UPC, pero los avances han sido mínimos y las expectativas no son alentadoras. Según Denis Silva, vocero de Pacientes Colombia, el Gobierno no ha demostrado un interés real en ajustar los recursos, lo que prolonga la crisis y deja a millones de colombianos sin garantías de atención médica adecuada.
Sin embargo, la situación sigue generando un fuerte debate en el país, con posturas polarizadas entre el Gobierno y los expertos en salud. Mientras tanto, millones de ciudadanos permanecen en la incertidumbre, enfrentando un panorama cada vez más complejo y sin soluciones concretas a corto plazo.