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Separar y reciclar, herramientas clave para fortalecer la economía circular en Colombia

- Reciclar es el proceso de convertir los materiales aprovechables, como los envases de Tetra Pak que han sido separados y recolectados en nuevos productos para ahorrar recursos naturales.

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En este mes de mayo se celebra el Día Internacional del Reciclaje, una fecha clave para concientizar a la población sobre la importancia del cuidado del medio ambiente. Tal y como lo muestran los datos, en Colombia, el Ministerio de Ambiente señaló que, en 2020, 1.903.269 toneladas de residuos fueron aprovechadas por 494 prestadores del servicio público de aseo, significando un incremento en el reciclaje separado desde la fuente. A pesar de este avance, es relevante aclarar la diferencia entre la separación y el reciclaje de residuos. 

La separación consiste en clasificar los diferentes tipos de residuos aprovechables en categorías específicas y disponerlos en el contenedor adecuado o entregarlo a los recicladores de oficio antes de ser enviados a su correspondiente proceso de aprovechamiento. Esta práctica ayuda a facilitar el proceso de reciclaje y reduce la cantidad de sobrantes que se envían a ser enterrados en los vertederos. Al separar los materiales, se pueden identificar cuáles de estos son reciclables, y los que no, lo que permite su correcta disposición y procesamiento.

Existen algunas recomendaciones que hay que tener en cuenta a la hora de separar los materiales, como conocer el tipo de elemento con el que están fabricados, con el fin de saber, entre otros, si estos son peligrosos bajo una manipulación errónea. También, es clave reconocer el contenedor adecuado para cada tipo de residuo. Esto facilitará el proceso de separación y ayudará a garantizar que los elementos se reciclen correctamente. Por último, es importante limpiar y retirar cualquier resto extraño que pueda estar presente en los materiales.

Reciclar, por su parte, es el proceso de transformar los materiales que han sido separados y recolectados en nuevos productos para ahorrar recursos naturales. Los componentes reciclables se benefician o se les agrega valor para que puedan llegar de nuevo a los consumidores como nuevos artículos. Por ejemplo, al cartón de Tetra Pak para bebidas, se le puede dar un nuevo uso, convirtiéndose en cartones para huevo, contenedores de comida, entre muchos otros. El poli etileno y el aluminio se convierten en gafas, mobiliario escolar, entre otros.

La separación se puede realizar desde casa y existen compañías que cuentan con aliados como las organizaciones de recicladores de oficio, que se encargan de reciclar residuos sólidos para que puedan ser transformados. Un ejemplo de ello es Tetra Pak, que ha realizado numerosos proyectos con el objetivo de conseguir que todo el territorio nacional cuente con una infraestructura de recolección de sus envases posconsumo. Desde su componente de sostenibilidad, Tetra Pak busca fomentar la economía circular a través del reciclaje.

Entre los proyectos más destacados se encuentran las alianzas para recuperar elementos aprovechables, como Red Reciclo; la apertura `ReSíclamos`, un centro de acopio que recuperará más de 13 millones de envases posconsumo de Tetra Pak al año en los Santanderes. Sin olvidar la colaboración con la marca de accesorios Fento, en el que se lanzó una colección de gafas hechas a partir del aprovechamiento del polietileno de los envases y que, adicionalmente, busca aportar a la seguridad alimentaria del país con la compra de estos artículos. Todos estos esfuerzos hicieron que en el 2022 se reciclaran 4.247 toneladas de material, contribuyendo de manera positiva a la reducción de residuos sólidos.

El reciclaje y la separación son prácticas importantes para cuidar el medio ambiente y reducir la cantidad de residuos que se envían a los vertederos. Es importante diferenciar ambas prácticas y llevarlas a cabo de manera responsable para lograr un futuro más sostenible.