Se informa que en el sur del Atlántico se estaban sustrayendo más de 600.000 litros de agua diariamente del acueducto, según Aqualia, la empresa encargada.

Se han identificado al menos 30 puntos de conexión ilegal a lo largo de 14 kilómetros de tubería de aducción desde el Canal del Dique hasta la planta de tratamiento del acueducto Manatí – Candelaria.

La pérdida de estos 604.000 litros al día equivale a la capacidad de 60 carrotanques, lo que representa una mejora significativa en el servicio al aumentar el suministro de agua a la planta de tratamiento de 98 a 107 litros por segundo.

Edwin Ortiz, jefe de la Unidad de Aqualia, declaró: “Hemos logrado neutralizar el tramo de Manatí – Candelaria, interviniendo en esa zona rural y encontrando diversas conexiones fraudulentas que afectan a la comunidad en general a través de este robo de agua. Además, hemos estado llevando a cabo actividades adicionales como la instalación de equipos para abastecer la planta”.

IRREGULARIDADES EN CONEXIONES EN CABAÑAS

Por otro lado, Triple A informó que más de 40 cabañas destinadas al descanso estaban conectadas de manera irregular a una línea de una pulgada que se extendía por 2.5 kilómetros del sistema del Acueducto Regional, afectando a comunidades como Usiacurí, Juan de Acosta y todo el corredor costero.

“Hemos descubierto más de 40 cabañas conectadas de manera irregular a las líneas principales. Esta manguera tiene un recorrido de más de 2 kilómetros y hoy la estamos desactivando. Esta situación impacta en la provisión del servicio en la zona costera del departamento”, dijo Sneider Lobo, director de Pérdidas Comerciales de Triple A.

Las autoridades han anunciado que continuarán con los operativos para reducir el impacto en la prestación del servicio debido al robo de agua.