La Justicia procesó judicialmente a un patrullero de la Policía, integrante del Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD), como presunto responsable de la muerte de un joven de 26 años durante una protesta el 22 de junio del año pasado en Bogotá.

Se trata de Gonzalo Moreno Gordillo, a quien, según la evidencia presentada, «habría disparado un lanzagranadas contra la víctima, quien estaba distraída por la reacción de la tanqueta oficial y se encontraba distante de un grupo que confrontaba a la fuerza pública» en un barrio del sur de Bogotá, informó este jueves la Fiscalía en un comunicado.

Según la argumentación de la Fiscalía, el patrullero «desconoció los parámetros dispuestos en los manuales que rigen la especialidad y desatendió los protocolos de uso definidos para este tipo de artefactos, pues lo accionó de manera lineal y directa a una distancia de 27 metros, e impactó en la cabeza» del joven.

Por eso, la Fiscalía le imputó a Moreno Gordillo el delito de homicidio, cargo que el policía no aceptó. También se le solicitó al juzgado prisión preventiva para el imputado, medidas que el juez de garantías rechazó.

Este caso es uno de los de más de 80 personas fallecidas durante las protestas contra las política gubernamentales que tuvieron lugar entre mayo y julio del año pasado, de las cuales, según la Oficina de Derechos Humanos de la ONU al menos 28 se pueden achacar a la acción policial, mientras que organizaciones sociales culpan de al menos 33 muertes a los miembros de la fuerza pública.

EFE