En este EP decide adentrarse en una relación tóxica que vivió, nos cuenta una historia de principio a fin de amor y desamor, una historia que comenzó un 9 de agosto y terminó el 19 de mayo. 

“Es un reflejo de lo que soy y de lo que busco proyectar a través de mis canciones, y quise acompañarlos también de unos visuales que retratan cada una de estas líneas.”, mencionó el cantante mexicano.

La gran parte de los temas fueron escritos por el cantante, mencionando que tuvo apoyo de su psicóloga y su productor para involucrarse en unas cuantas, las cuales se grabaron en el estudio de Mariano Castrejón, su productor.

“Me identifico más con “No lo prometo” porque es una canción con una letra muy real, y la verdad es que así ha sido mi historia, no prometo soltar, quiero ser portavoz de esas personas que no han logrado salir de un ciclo tóxico.”, expresó Juan Pablo Zola.

Con tan sólo 24 años de edad, el cantante está dispuesto a obtener su propio lugar dentro de la música bajo la influencia del pop, sin descartar que seguirá buscando un sonido que represente a una nueva era de Juan Pablo Zola. 

El reto más grande que ha estado enfrentando es lidiar con la depresión, ansiedad e inseguridad bajo el ojo del público, tener esa desconfianza de recibir respuestas negativas y todas las veces que le han cerrado las puertas sabiendo que es su sueño.

Dentro de sus próximos planes se encuentra realizar presentaciones donde pueda interpretar en vivo cada una de sus canciones, y más personas se sientan identificadas con cada una de estás, logrando que el cantante sea su lugar seguro.