Se trata de Myka y James Stauffer, youtuber estadounidenses que se hicieron virales en redes sociales por tener un canal en Youtube, en el que el protagonista era su hijo adoptivo, Huxley de nacionalidad china.

Desde el año 2017, esta pareja del estado de Ohio, comenzó a recibir ingresos por sus videos y patrocinadores que se interesaban en la conmovedora historia del proceso de adopción y crianza de Huxley, un niño con una condición especial, pues durante el proceso les advirtieron que podría llegar a tener un daño cerebral.

Los youtubers les pedían a sus suscriptores una colaboración de cinco (5) dólares, con la justificación de quizá el bebé tuviese una condición diferente, y con frases como “Dios nos ablandó el corazón” intentaban despertar la solidaridad de quienes los espectaban.

Por medio de este canal, esta pareja recibió muchísimas donaciones por más de la cifra que pedían y, además, fueron solicitados para jugosos contratos de publicidad, en los que el pequeño Huxley era visto como una marca comercial.

En redes sociales se ha desatado una lluvia de criticas por parte de los internautas, pues aseguran que luego de que la pareja se hiciera rica y famosa con la historia del niño, literalmente se deshicieron de él y lo enviaron de nuevo al sistema de adopciones.

Lo anterior se dio, debido a que tres años después de que estuvieran conviviendo con Huxley, él fue diagnosticado con autismo y sin avisos dejó de aparecer en los videos de los youtubers; luego de críticas, el pasado martes la pareja tuvo que confesar que ya no vivían con el niño y se excusaron asegurando que había sido por “temas de convivencia”.