La ONU condenó el asesinato de un niño de 12 años y un joven de 18 años, ambos venezolanos, en el municipio de Tibú, Norte de Santander, acusados de intentar robar unas prendas de vestir de un centro comercial.

Al respecto, Jaime Marhey, defensor regional de Norte de Santander, señaló en que desde hace tres días los cuerpos están en Medicina Legal, pero aún no se han presentado familiares o conocidos para reclamarlos.

“A la fecha no hay ningún familiar que se haya hecho presente para reclamar los cuerpos, están en Medicina Legal (…) Estaban solos, vivían en el pueblo. Ya llevamos más de tres días de la situación y no hay familiares que aparezcan para reclamarlos”.

“Eso sucedió en uno de los comercios de Tibú, cerca al parque. Varios comerciantes fueron los que aprendieron a los jóvenes que pretendían hurtar algunas prendas de vestir (…) Hay otro video donde se ve un forcejeo entre unas personas y luego se los llevan en unas motos y, después aparecen asesinados”, añadió.

Sobre los hechos, el defensor regional indicó que están a la espera de las investigaciones de la Fiscalía y autoridades del caso.

«Lo que conocemos es lo que salió en los videos, hay varios interrogantes sobre el tablero. Estamos esperando las explicaciones tanto de la Fiscalía como de los órganos de inteligencia y disciplinarios de la fuerza pública para saber si en realidad recibieron llamadas», comentó.

En los videos difundidos en redes sociales, se ve cómo los comerciantes amarraron a los jóvenes para entregarlos a las autoridades.

En uno de esos videos, quienes los amarraron les advirtieron lo que les podía pasar: “Vamos a entregar a estos muchachos a las autoridades (…) Lamentablemente son muy jovencitos, no queremos verlos mañana tirados en la orilla de la carretera, bajo nuestra responsabilidad están”, dice una de las personas en las grabaciones.