Hermes Pete, consejero mayor del Consejo Regional Indígena del Cauca, Cric, advirtió que la Minga está dispuesta a regresar a la ciudad de Cali, si los jóvenes que protestan en las calles siguen siendo objeto de acciones violentas.

“Porque se vino la minga no pueden seguir asesinando a los muchachos. Le pedimos a la comunidad internacional, a los garantes de los derechos humanos, que los acompañe, pues si siguen asesinando seguramente nos toca regresar como Minga”.

El dirigente aseguró que hay un plan para asesinar a los jóvenes y lamentó que el Gobierno, en cabeza del presidente Iván Duque, vea como única salida la represión contra los manifestantes.

Las comunidades que se encontraban en las ciudades de Popayán y Cali llegaron al sector de El Pital, municipio de Caldono, desde donde continuarán con las protestas en el marco del paro nacional.

Este jueves a las 6 de la mañana, termina el corredor humanitario habilitado por las diferentes organizaciones que participan en la movilización, que permitió ingresar alimentos, combustibles e insumos médicos a Cauca y Nariño.

“Ahora revisaremos el paso a seguir, de acuerdo al comportamiento en el país y las autoridades nos darán las directrices, el paso a seguir dependiendo del comportamiento”.

Las comunidades aseveraron que las reformas que presente el Gobierno deben representar el sentir del pueblo colombiano.

“El hecho de que nos hayamos venido del Valle no significa que nos vayamos para la casa, ya empezaron a llegar las chivas, el personal se reunirá y esperarnos orientaciones de nuestras autoridades”.

Los bloqueos en la vía Panamericana han generado dificultades para el transporte de pasajeros y la escasez de diferentes productos de primera necesidad ha sido evidente en el suroccidente del país.

Los gremios empresariales y productivos de la región insistieron en que están de acuerdo con la protesta pacífica, pero exigieron el respeto de los derechos de quienes no participan en las movilizaciones.