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Miles de personas huyen de sus aldeas en Níger por la amenaza yihadista

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Miles de personas han abandonado sus aldeas en la región de Tillabéri, en el suroeste de Níger, en los últimos dos días tras recibir un ultimátum por parte de los yihadistas que operan en la zona, informaron este sábado a EFE fuentes locales.

Según Hama Amadou, un funcionario estatal en la localidad de Torodi, en Tillabéri, los habitantes de las aldeas orientales de la comarca de Ouro-Gueladio empezaron a huir de forma masiva desde la noche del jueves.

«El flujo de familias que escapan de las aldeas para evitar las atrocidades de los yihadistas continúa con intensidad. Unos siete pueblos y 19 caseríos de la orilla derecha del río Goroubi se han vaciado ya de su población», dijo Amadou.

El responsable local ha estimado el número de personas que han abandonado sus casas en este nuevo movimiento de desplazados en cerca de 7.500 personas, la mayoría de ellos se refugiaron en Ouro-Gueladio, capital de la comarca homónima.

Sin embargo, cientos de ellos se han dirigido a Tarodi y a la capital Niamey.

«Las autoridades locales y los militares en Torodi están informados del ultimátum de tres días que los yihadistas nos han dado para abandonar las aldeas. No han hecho nada para impedirlo», dijo a EFE Harouna Garba, uno de los desplazados.

«En el camino, vimos a yihadistas quemando casas y graneros abandonados», lamentó tras llegar a Ouro-Gueladio.

Los habitantes de la orilla derecha de esa región se vieron obligados a dejar sus aldeas en plena temporada agrícola con la llegada de las lluvias al país, agregó.

El ultimátum para abandonar las aldeas les fue dado en la noche del martes al miércoles, tras la incursión de un grupo de yihadistas en motocicletas en tres pueblos, que se saldó con el asesinato de dos aldeanos, según Garba.

Esta zona de la región de Tillabéri, en el extremo suroeste de Níger, es desde 2021 la más afectada por los ataques de los grupos yihadistas que causan víctimas militares y civiles, y flujos esporádicos de desplazados. EFE