Como si se tratara de un ultimátum sicarial, dos coronas fúnebres fueron enviadas al médico José Julián Buelvas Díaz, acusado por dejar morir a una paciente contagiada con COVID-19. A través de un video, el profesional pidió auxilio al Gobierno Nacional ante esta situación.
“Soy médico internista intensivista de la UCI de la Clínica Adela de Char de Soledad. Recibí dos sufragios, uno en mi trabajo y este llegando a mi residencia, me acusan de dejar morir a una señora en pandemia en la UCI”, dijo Buelvas, con los ojos bañados en lágrimas.
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“Es imposible que nosotros dejemos morir a la gente, fuimos formados para salvar gente, es un pedido de auxilio y ayuda al Gobierno Nacional, por mí y mis compañeros, por los médicos de este país, por Dios, hasta cuándo”, añadió el galeno.